domingo, 28 de diciembre de 2008

Estación como el viento relámpago abolición de toda consecuencia. Primer recuento del año que me volvió tamarinda y un poco más cabaretera

1.1. Esta diminuta fatalidad la expulsó un suspirito de ternura

Cuando volví a México una de mis mejores amigas me dijo "todos cambiamos, acostúmbrate". Considero que sí mutamos, mudamos, pasamos a ser un poco más anfibios, o tal vez un poco más rapaces para evitar que nadie nos arrebate las esquinas de sol. Ahora admito que soy un poco de todo, cabrita, anfibio, lobita (esta palabra cómo me hace reir), venadito que gusta asustarse de vez en cuando porque le gusta ser arrinconado por...

No me gusta "acostumbrarme a los cambios" porque creía engañarme al decir "he cambiado". Esta mutación huía (aún no estoy segura de las acciones que ésta tomaba para dejarme sola), y retornaba a mi condición de llorona a la espera de la siguiente barca que me negaría subirme a ella por enésima vez. No voy a salir con la gran mentira de "soy otra, me he renovado, que venga todo el viento que voy a vestirme con él y no quedará más túnica". Eso sería engañarlos cabarenautas, y hacer este blog más raro y tonto de lo que ya es. Sólo diré que me atreví a bailar, a balbucear, a hacer el ridículo sin lamentarme durante una semana. Intento defenderme, aprieto más el gatillo porque la homogeneidad me da pavor.

Una vez asumida esta pérdida de no rostro, son necesarias nuevas gafas. La vista advierte una península, extranjera de la niebla y abierta a cualquier aire. La voz aquiere un cauce que huye de cualquier pez. Y llegan los claros, como alfileres, abren el pecho y lo cierran a los demás alternativamente. Todo esto ocurrió (y continúa pasando) durante un año, mitad en el seco corazón de Madrid y el resto en una rama xalapeña. De repente ¡un golpe! I was ready to taste everything, including you...

La amiga que me habló de los cambios aún no se acostumbra a "mi cambio", tal vez se siente más segura tomando de la mano a la otra L, cette éternelle amie clandestine.


1.2 ¿Consecuencia, error, o cruel transición?

El vínculo más filial puede romperse por un giro carnavalesco de la vida. Creía que cualquier sisterhood podría ser inmanente, como esos hilos que ninguna estatua (con su peso, única certeza de su existencia) podría arrancar con su pose de roca, mármol, o hierro. Tal vez, cuando ya no hay nada más que compartir, cuando las ideas de uno y otro extremo son guiadas por columpios diferentes resulta más saludable emprender la retirada. Lastima.

1.3 Pasemos a un poco de humor antes de continuar con mis remembranzas dosmilocheras

A ver. Ayer vi en conocido canal de música "las cien mejores canciones en español en los noventa". Bueno, el conteo lo hicieron en función de las ventas, de las listas de popularidad, de cuántas veces sonó en la radio porque no entiendo cómo la mayoría de las canciones eran pop. Entonces surgió una gran preocupación ¿es que nuestro país no cuenta con buenos roqueros? Vamos, en primer lugar estaba living la vida loca ... hey, no se burlen, esto me angustia, esto resulta preocupante. Nací a principios de los ochenta por lo que parte de mi adolescencia transcurrió en aquellos ayeres. Bueno, responde a mi pregunta el hecho de que, por aquellos años (y aún en la actualidad) escucho más música en inglés. Dentro de las veinte mejores estaba Kumbala, Ingrata, la célula que explota, gimme the power, de música ligera (reconozco que era pequeña y me pasaba esa canción)matador(¿hasta qué punto los Fabulosos son roqueros? no importa, me gusta tanto esa rola). No sabía si afligirme por saber que Mujeres de Arjona estaba entre las diez primeras o por ver a Gloria Trevi o a Fey haciendo comentarios, sobre todo a la segunda, que necesita desesperadamente al menos una neurona. ¿No hay rock, no hubo buen rock en nuestro país?
No quiero imaginar lo que pasaría si llegan a hacer un conteo de las mejores canciones del 2000-2008 : ver a los miembros de RBD como críticos de música hablando de lo "chida" que es alguna canción de Maná (debo decir que me caga Maná).

1.4 En este año deshice, desteñí. El vestigio de tan buenos y cabareteros recuerditos

-Bailé
-Fumé porrito, toquecitos dignos de alguien que sólo fuma cuando está ebria
-Me agarré a besucos con interesantes elementos
-Leí, no en grandes cantidades, pero leí
-Agarré pedas muy divertidas, honorables y una en donde me llevaron en taxi en calidad de bulto
-Escuché con gusto bandas ochenteras
-Le menté la madre a unos estultos y por eso me echaron de un trabajo
-Defendí a una lobita lo mejor que pude
-Durante mi estancia en tierras españolas no dejé de llamarle en la madrugada a un manquito por ser, hasta ahora, uno de mis mejores interlocutores.
-Defendí como pude mis traducciones, por ser "demasiado mexicanas"
-Me reencontré con antiguos amigos
-Inevitablemente, terminé con algunas relaciones.
-Viajé, reí, confirmé que uno de mis pintores favoritos es Munch
-Me atreví a leer mis poemas en público
-No sé hasta qué punto fue bueno regresar a X.
-Paris me gusta, el foie gras no tanto

1.5 ¡Ya estuvo bueno de tanto cotorreo!

No haré propósitos, sólo quiero escribir y lorenear

¿y ustedes?

1.6 Abrazos

Para los que no me leen y me leen, a quienes les debo mi apertura, mis ganas de esconderme, de rabiar y de soltar carcajadas

LADO A
Eve, Idy, Rosi, Carmen, Franzi, Pasqual, Michelino, Mirjam, Marito, Carmen Alemania, Cam, Vincenzo, Laulau (el Lorenzo más Loreno), Lena, Lars, Chris, Debbie, Clara, Monique,Manquito, Patrick.

LADO B
My lovely little red vers, Pac, Joy, J., Misha mon amour, gringo mignon, Azrael, Alessa, Norueguín (porque es más mexicano que cualquier otro noruego), Claus, Elen, vecin, buen Piper, coyotita, chico antártida, arqui zam, Malv, JLR, Blimunda, chicos del sabatino, Frolo (aunque su vida sea distinta), Monc, Nicole, un puñadito de otros ex alumnos, Ms. Dashwood -even if she doesn't care about me anymore-,EARL, chico mitad irlandés, Galo, Omarcín, Caro, Med, A, prof. Ber, Maga, Yes, Armandis, el diseñador industrial.

¡Que los abrazo aunque no quieran!

Abrazos besuquillos versión especial:

-N.
-H.

lunes, 17 de noviembre de 2008

Mojabobos (love, love, love) tres - o muchas- veces no


Me he tomado el atrevimiento de escribir con la música de fondo del blog del chico de la antártida (espero no le importe), es sólo que, cuando puse "play" de inmediato surgió la conversación que había tenido con un gran amigo hace una hora.


Aún no sé distinguir el cristal del hielo.

No sé la diferencia entre la velocidad a la que lleva un río del impulso que toma la ola en el escollo. Ignoro de qué color se mira lo que nombro, no sé si mis frases son vistas como lápiz en desuso o como un vestido de escote prodigioso, aquel que triunfa por las noches e insulta con elegancia al humo del cigarro y a las miradas envidiosas.


Las preposiciones son una de mis flaquezas. (Nombre por confirmar) en _________ con(nombre que no hay que nombrar) para_________. No sé a cuántos grados gira el deseo, desconozco dónde habita la ternura y cuándo golpea la lujuria, ignoro de dónde brotan tantos moretones que tiñen a la vanidad y en qué parte del cuerpo se notan más los rasguños. Me confunde el ángulo en el que a veces quiero llorar. Pero ahora no puedo llorar. Y no sé si estoy adolorida.


Soy torpe para tomar la mano del otro. No convido en los momentos necesarios la dulzura, a veces la arrojo a la ventana del coche, cuando hay tráfico, para que se sienta miserable. Sé que soy pesimista ahora, y suelo serlo cuando me duele el cuello, lo hago para prevenir que lleguen otras manos y me hagan nuevas marcas, porque a las antiguas les gusta aparecer, les gusta mostrarme sus arrugas y decirme "mira cómo he vivido, y las que me faltan, te las mostraré siempre porque siempre serán también tuyas".


Podría ser una cabrita que brinca sin nadie en el monte, y por eso me reto, corro lo mejor que puedo hasta llegar a la barranca, y me detengo, a duras penas, y lo hago una y otra vez, porque el vértigo me gusta aunque en el fondo tenga pavor a romperme al menos una pata.


Podría ser una tonta, porque sé que la apariencia puede catapultar a la dificultad, a la desgracia, sin embargo quiero alcanzar con estas dos zapatillas la mayor altura.


Podría ser descuidada, en uno de los bolsillos he dejado el corazón, a veces es el sitio más seguro, nadie, nadie me lo quitará, si voy a una fiesta nadie me lo quitará, parce-que ce n'est pas du vin, parce-que ce n'est pas une drogue.


Podría ser la más ingenua, porque creí que aquel roce era prescindible, porque creí podría detener a tiempo la causa-efecto.


Ignoro la relevancia de las imágenes. A veces me atrevo a interpretar textos, pero no las fotos, sobre todo cuando hay "dos" en primer plano, y "uno" de esos dos, resulta ser una astilla que no alcanzo a retirarme y que no entiendo por qué me molesta cada seis horas.


Play, Rewind, Forward, Stop, Pause, Rewind, el giro de la cinta provoca ardor en el pecho, detiene la respiración. No sé cómo pesar el silencio, no sé cuándo es para olvidar, cuándo para detener, cuándo para devolver, cuando para arrullar. Sólo entiendo que puede ser paranoia, el reemplazo de la incertidumbre, y ésta puede provocarme un dolor, no sólo abdominal. Y esto, por ahora, es lo único que me atrevo a decir que sé.

domingo, 19 de octubre de 2008

El efecto Pineda, la consecuencia Smiths: todo ha vuelto a estar blanco, listo para rayarse

Sweetness, sweetness I was only joking when I said I’d like to smash every tooth in your head

Asumo no haberme beneficiado con aquellas palabras aquel día. Sin embargo lo dejo atrás. He conocido antes el impulso de la ruptura.

¡Ya tengo empleo!

El rol Moncayo

take me anywhere, I don’t care
just driving in your car
I never never want to go home
because I haven’t got one
I haven’t got one

La orfandad no puede ser engañada con raíces. Y el nomadismo no se detiene a golpes (al menos el mío). Desconozco la forma para engañar a esta sombra. ¿Por qué permití entonces aquel puntapié?

Consideración 100% Lorenesca de este día (también es válida para todo tiempo y lugar, porque esta tamarinda, al ser una irremediable clavadista profesional, no se siente amenazada por el impacto de la caída, porque sigue cayendo, sigue cayendo, y continúa arrojándose)

Para conocer la sabiduría del naufragio basta olvidar nuestro peso, prolongar la laxitud del cuerpo, ser Caronte con la barca y las manos vacías. Quien desconoce la inutilidad de la brazada para llegar a tierra firme, es por miedo a saber que el origen de sí mismo se conoce a través de una minúscula pausa, cuando los brazos se dan por vencidos y en el ritmo del agua las piernas se despiden de la angustia por haber sido torpes.
El ahogo sólo es reconocible cuando inútil te sometes a la velocidad del nado por la ansiedad a las orillas.
Pero el abismo cobija en cualquier momento y densidad.

miércoles, 15 de octubre de 2008

She's lost control. Motivos de la despedida

1.1. A los cabarenautas en general:
La victoria de 20 estultos no me dejó en el suelo. Pero otra vez ingreso a las filas del desempleo.
Cansada de escuchar sobre alcohol, sexo, alcohol, y de que no me hicieran caso, decidí salir del salón de primer semestre. Al cerrar la puerta aplaudieron, y entonces Caribdis emergió, y los enfrenté. Pero saben que los cobardes nunca reconocen las piedras arrojadas. Y dije "la mitad del salón son unos pendejos". Esa fue mi ruina, pero era un desahogo que salió, desesperado por tanto encierro.
Las chicas, cuyos nombres diré a continuación, sólo por mi gustito personal, me miraron como si de verdad las hubiera ultrajado. Dada la ausencia de neuronas y otras cuestiones que francamente no quiero indagar, dijeron "todo se paga". Pero ¿en qué consistió mi castigo? Les dije la verdad, que son unos pendejos, por su apatía, su alto grado de superficialidad. A continuación las más indignadas y sus frases célebres que Dios mío, protégelas por tanta estupidez, espero de corazón encuentren un ganadero rico que las mantenga o que sus padres tengan los contactos suficientes para que no mueran de hambre, o que usen el cuerpo ya que carecen de intelecto:
1.No supo qué era un juego de fotocopias, y menos supo cuando dije "un juego para cada uno". En el primer parcial el inciso DI, lo puso como DL porque le parecía que la I mayúscula Times News Roman parecía L... es la chica de 10, pero sabemos que las macheteras son fuentes de almacenaje de información y no de reflexión.
2.  Preguntó porqué la conjugación de la primera y tercera personas del singular del modo subjuntivo del verbo haber eran las mismas. Es la chica, cómo llamarla... clueless. La risa hueca como su cabeza.
3.  Agárrense, es la mente más lúcida nunca antes vista. Les di a leer la última parte de La Jaula de la Melancolía de Bartra. Les pregunté : "Para ti ¿tiene sentido ser mexicano?" su respuesta fue: "y ¿porqué no? es como si le preguntas a un argentino si tiene sentido ser argentino o a un chileno si tiene ser sentido ser chileno... juzgad.
2.2 Carta abierta al resto de mis alumnos, los de tercer y quinto semestre, si algún día me leen
Queridos todos:
Lamenté mucho haberlos dejado. Aprendí que podía caminar en un salón de clases sin sentirme como animalito asustado. Cada vez que reían sentía que, muy en el fondo, tengo un poco de ingenio. Si algún día comparto una chela con ustedes, me pondré contenta. Gracias por sus notas de apoyo, por sus palabras en donde me expresaron que no me fuera. Gracias por considerarme una buena profesora, aunque sigo pensando que estoy bien loca. La respuesta de Williams no la olvidaré. Lamento que el proyecto del diario de lectura no se haya visto terminado, me hacía mucha ilusión leer sus trabajos.
Los próximos títulos de mis entradas tendrán algunos de sus nombres o apellidos, espero no les importe, al fin y al cabo -y aquí comienza lo cursi- fueron muy especiales para mí, me hubiera gustado tomarme una foto con ustedes. Recuérdenme algún día, sólo un segundo, cuando fumen, cuando lean a los rusos o cuando alguien los obligue a leer.
P.D. Que ninguna de las ilustres mentes citadas líneas arriba se entere de mi blog, ya saben, necesito este pequeño espacio de gloria personal, jajaja

jueves, 2 de octubre de 2008

La novela elegida para la elaboración de un diario de lectura

A mis estudiantes de tercer semestre les di a elegir tres novelas para la elaboración de un diario de lectura, el cual deben entregarme en dos meses y medio (he sido benévola con la fecha de recepción de trabajos), a continuación las siguientes cifras... ¿serán sorprendentes? júzguenlo ustedes mis tamarindos y acepto con gusto su opinión:
El jugador- 10 alumnos
El corazón de las tinieblas- 10 alumnos
Pedro Páramo- 3 alumnos
En cuanto a la lista musical que Paquito me pidió, mencionaré algunas rolas:
1. Personal Holloway- Bush
2. Back to school- the Deftones
3. una rola de Maximo Park
4. Gamma Ray- Beck
5. una rola de A Perfect Circle
6. Love is noise- the verve
7. Una rola del segundo disco de Interpol
8. Vancouver- Jeff Buckley
Debo decir que mis alumnos trabajaron ese día en silencio, y escribieron muy buenas leyendas, no se quejaron de la música de su profesora, aunque una alumna, una de las más dulces, sólo le dijo un día a su madre (me enteré por la junta de maestros y padres de familia) "escribimos y la maestra Lorena nos puso una música bien rara", me reí un montón.
Un apunte más para la reflexión y para que me comenten algo:
Apliqué un examen, a primer semestre para ser exacta, en donde pedí cuatro ejemplos de palabras agudas, cuatro graves y cuatro esdrújulas. Mis alumnos, varios, escribieron algunas con acento prosódico y no ortográfico. Lo he consultado y eso lo he visto sólo en palabras graves... puf, estaban indignados por las décimas que les desconté. Algo me dice que no duraré mucho en esta escuela...

jueves, 25 de septiembre de 2008

La respuesta de examen más simpática del mundo, el epígrafe balón de colores



Porque es la mejor forma de expresarse por
el medio escrito, da a conocer sentimientos,
emociones, y ya no vas a tener faltas de orto-
grafía porque la maestra Lorena es buena.


Eduardo Williams Herrera, sobre la
importancia de la literatura (valor 2
puntos)


Créanlo tamarinderos míos, el joven aquí citado, alumno mío de tercer semestre (mi grupo favorito debo decir) escribió estas líneas el día de ayer que presentó el extemporáneo de mi curso. ¿Acaso piensa que pondré los dos puntos que vale la respuesta sólo porque me ha mencionado? Ni siquiera sé si soy buena profesora o si llegaré a serlo. Al leerla arrojé la carcajada. Y no, no le puse los dos puntos. A pesar de ello pasó el examen con un siete punto nueve. Eduardo, siempre voy a recordarte.

Otro estudiante, de quinto semestre, según el grado de conocimiento, el narrador que conoce todo lo denominó omnipresente. Dicho joven obtuvo un cuatro punto ocho.

En mi última entrada alguien preguntó qué había pasado con (mis) los chicos de tercer semestre que me pidieron les leyera un poco de Tristán e Isolda. La clase siguiente les puse música, mi música para que hicieran una leyenda. Todos son imaginativos, no les puse mala calificación, no soy maestra barco, se los juro, estoy asombrada con ellos, todo el tiempo responden a mis embates literarios, empujan, se impulsan… por eso… ¿porqué malgastan su tiempo frente al chat?
Ayer aquella deuda de lectura de la muerte de los amantes Tristán e Isolda la rubia quedó saldada. Les gustó mucho. Y a mí me gustan ellos, aunque Mariano hoy me respondió de una forma maleducada.

jueves, 18 de septiembre de 2008

albricias (vancouver)

Hoy mis tamarindos, hoy mis alumnos de tercer semestre no se movieron de sus pupitres cuando sonó el timbre para el cambio de clase. En lugar de tomar mi brazo para voltear, me regalaron sus miradas curiosas y me dijeron que no me fuera hasta que les dijera en qué terminaba Tristán e Isolda. Hubo suspiros, hubo atención, y quieren que la próxima clase les lea algunos fragmentos.

domingo, 14 de septiembre de 2008

I bet you look good on the dancefloor. Triste tristísima

Culpen a los artic Monkeys, qué más da.
Si he demorado en escribir una nueva entrada en mi blog ha sido por mis alumnos, mis muchachos, mis clases... me he dado cuenta que a medida que pasa el tiempo, estar en esta ciudad me aleja de mis vicios y de los amigos, supongo que es una de las consecuencias de trabajar, de no irme al df. Mis alumnos, culpen también a mis alumnos. ¿Porqué estoy culpándolos?
Una de tantas desventajas de no socializar. Esta práctica, que años atrás la consideraba irrelevante, ahora me parece indispensable para matar tiempo en mi ciudad-pueblote. Pero veamos, ayer recibí un mensaje en donde me invitaban al antro, pero ¿adivinen qué? detesto los antros xalapeños. Para empezar corro el riesgo de encontrarme con mis alumnos, ya de antemano me sentiría un poco incómoda, y para terminar la música es una porquería. Una de las cosas que más me dan risa de los pijos xalapeños es que, como el resto de los pijos, les gusta estar "naqueando" a los que no se llevan con ellos y muchos gustan bailar o cantar a coro la música popular, esto es, la música banda, o lo que es peor, van a escuchar "música en vivo" con una "banda" que únicamente toca canciones pop. Y ahora, que han abierto un lugar cubano, jaja, ahí van, pero ¿acaso la salsa no es un género digno de naquear para estos chicos? en fin, si no piensan en mis clases, menos se ponen a reflexionar "hey, un minuto, soy fresa, no debería estar aquí bebiendo mojitos". He llegado a la conclusión que el día que haya un lugar para rocanrolear, ese día se acaba el mundo, es más probable que los zetas no sólo invadan Clavijero y lleguen a los antros como leí en un forward que me envió una amiga, sino que estén en cada esquina buscando a quién secuestran. Así que, mi ciudad está teñida de rojo y poblándose de zetas... la razón, el infiel a veracruz.
Lo que me queda es poder salir a correr por las mañanas, ya que mis horarios de docencia han cambiado. Algo que he advertido es que, cuando voy acompañada por mi mamá adquiero un estatus, es decir, los señores y señoras que van me dan los buenos días porque cuando iba sola ni un suspirito deportivo me convidaban. Lo mejor es ir a las siete de la mañana, porque hay "tráfico de ñores deportistas" a partir de las siete y media hasta las ocho y cuarto, y hay que tener cuidado, algunos les entra el espíritu de competencia y son un poquito agresivos, imagínense, ¿cómo va a rebasarlos una veinteañera? ¡no, eso no!
En fin, regreso al baile y a la música. Están los raves, pero vamos, no soy fanática de la música, podría ir algunas veces, pero no todo el tiempo, y además tendría que tener algunos tragos encima porque tachas, a eso sí no le entro cabareñitos.
No me gusta plaza américas, el cine es muy caro y lo siento, pero la situación económica está tan mal que prefiero comprar películas pirata ... ¡un momento, ya no puedo ir a Clavijero! mis alumnos me han recomendado ir a CAXA, plaza museo y bueno, el mercadito que ponen en araucarias. ¡No he podido ver Batman! sí, me gustó la primera de Nolan y ahora quiero ver la segunda, vamos, no está peleada la literatura con estos gustitos cinematográficos. Ah sí, tampoco plaza Americas ofrece diversidad fílmica, otro gran problema con el que me he encontrado.
Me quedan sólo dos preciosos días para terminar mi puente, dos días en los que espero alguien se apiade de mí y me ofrezca un momentito de chelitas gritando viva México. Si eso no ocurre, tengo un fracaso social asegurado, y en consecuencia una tristeza inevitable.
En fin, ya leo nuevamente, les he pedido a los de tercer semestre hagan continuaciones de cuentos... ya sé ya sé, eso suena chafón, imposible, desconsiderado con el autor, pero vamos, concédanme la oportunidad de ver qué tan creativos pueden llegar a ser estos chicos... algo me dice que únicamente escribirán seis líneas... todas ellas con faltas de ortografía.
En fin, que ya son las ocho con treinta y cuatro en estos momentos y me siento como leoncito enjaulado, me siento molesta. Ya tengo sueño, no aguanto nada. Sí, ya sé, ando insoportable.
Por cierto, debido a que he andado como loca estas semanas, no tuve la oportunidad de desearle a mi mignon buen viaje y buena suerte en tierras gringas. Como siempre mi hijito cachondón hará de las suyas, pero seguro aprenderá un montón, además de consumir cantidades importantes de líquido etílico, hijo, si algún día lees esto, por favor, no dejes chamacos por ahí regados, jajaja.
Me siento un poco indignada porque hay última generación de la Academia y por el programa de Televisa que transmiten a la misa hora cuyo nombre he olvidado, pero es algo de ... por un sueño... creo que he errado. Debería considerar venderme como barata historia en lugar de enseñar literatura a unos adolescentes que no sé si llegarán a escribir con menos faltas de ortografía. Pero nada es tan malo, tengo dos buenos lectores, y uno de ellos, mis tamarindos colegas, tiene una mirada que no había visto en mucho tiempo, no puedo mirarle de frente porque me siento desarmada, que en cualquier momento va a atizar lo que estoy diciendo, dejándome muda y torpe, esto no debería estar pasando. ¡Peligro! Podría decirle el verso de Pizarnik: ayúdame a no pedir ayuda.
En fin, dejemos que esto pase como mis días inútiles de septiembre, mañana iré la feria del libro a ver si puedo agotar mi paupérrimo salario en algún hallazgo interesante, pero créanme, ahora soy tan egoísta racional que pensaré "oh, esto podría funcionar para mis alumnos.
Pues, buena noche del grito, si ocurre algo digno de contar, haré todo lo posible por no dejar pasar tantos días.
espejo de un bar (la despedida)

Querías mirarte pura tras la luz,
pero tenías una mancha en el vestido.
Entonces la cicatriz en su tartamudeo
que no cesa y cansa,
musitó para ti
“no hay mal que maldad sea”.
Tiñó más tu ropa,
y aquel deseo de mirar
el parpadeo luminoso frente a ti
se apagó, justo ahí, en tu eje,
descendiendo como tu cabellera
hasta la punta de tus zapatos,
en donde no existe mayor reflejo
que las colillas en el suelo,
tu fracaso.
¡Buenas noches tamarindos!

sábado, 23 de agosto de 2008

El canto de la salamanquesa. Una breve despedida al intento cabaret que gozaba sacudirse en las fiestas

La música ha sido para mí un rompeolas. Conocedora o no de la propia lengua o cualquier otra extranjera, el ritmo sale a la ventana, regresa, comienza su giro de ventilador y llegan los recuerdos o la prolepsis que siempre hace perder el tiempo de manera dichosa. Un silencio se prepara para tocar un tambor, los redobles hacen pensar en un viaje. ¿Enmudecemos al escuchar cualquier tipo de música? ya sea en el bus, en coche, en el metro, nos alivia de la canallada que es vivir de vez en cuando. Puede ser la mejor evasión o la más perversa cuando anulamos a los demás, formando parte de este clan individualista que olvida las señas del otro. Así que, damas y caballeros, también las notas tienen filo.
Algunas canciones sirven para sobrevivir al tráfico, para no tener que lidiar con uno mismo, para disfrutar de la compañía de los amigos y del infiel alcohol. Yo recuerdo las canciones en las que bailé desesperada, que me acompañaron en mis más divertidas experiencias etílicas, en la convivencia familiar, en algún lugar con los amigos, sola caminando para no pensar en los daños del pasado y del porvenir e incluso fueron testigos en mis deslices, y con ellas puedo pensar en lo que me gustaría hacer mañana o nunca, me dirigen hacia la inexactitud. Y eso por momentos me hace sentir tranquila, sobre todo cuando no tengo ganas de ver a nadie o por el simple hecho de recordar, de arrojar papeles de colores.
Comienzo ahora con disorder de Joy Division, acompañada de todo el trabajo que tengo que hacer y exhausta por esta semana llena de ajustes. La salamanquesa se ha anunciado.

Big exit
Tamarinderos: ya no soy una desempleada, y por el momento he decidido ingresar a otro tipo de fila, la de la docencia en secundaria y bachillerato.
Nunca digas nunca. Eso me lo repetía mi hermana Lis en cualquier tipo de situación, verán, suelo ser cabeza dura, quiero que el NO tapice las paredes. Cuando estaba en la universidad no me imaginaba de maestra, de hecho era algo que no quería hacer. Sin embargo atravieso por la etapa de experimentación, de ese “quiero saber qué se siente, qué pasa”, y bueno, sobre todo, ya quería trabajar. Oh, realmente la necesidad encamina hacia tierras inhóspitas.
Llevo pocos días en este asunto. Los adolescentes, por ser “la nueva” me miran de cabo a rabo, me examinan, unos me miran curiosos, otros son indiferentes, hasta unos tuvieron la desfachatez de preguntarme si estoy casada o si tengo novio (esos fueron los de prepa, que me dan unas escaneadas…), los de secundaria son los peores cabarenautas, cuando recuerdo mis tiempos como puberta realmente nunca fui tan maleducada. Los tiempos cambian y con ello la erosión del respeto. Pero ¿qué creen? su tamarindera ha conseguido el silencio en el aula y a ratos un poco el miedo. Me esfuerzo inútilmente por hacerlos pensar.
Alguien me dijo hace poco que soy una egoísta racional porque quiero que los chicos lean y piensen aunque algunos casos (la mayoría hasta ahora) están perdidos. Es lamentable ver cómo los padres no inculcan a sus hijos el gusto por la lectura. El Internet parece ser el opio del pensamiento, del regreso a la imaginación. Pocos, y digo muy pocos leen. Comparando con otro gran amigo, también profesor de bachillerato, me di cuenta que al menos en su escuela los estudiantes tienen lecturas, cuestionan, piensan. En cambio, de los pocos días que llevo, me doy cuenta que tendré que esforzarme, pero no quiero facilitarles la vida. Oh no. Es divertido ahora estar “del otro lado” y estirar la cuerda para ver hasta dónde puede llegar. Ese es mi propósito. Oh, esta egoísta tamarindo racional…
Así que… regresan mis diálogos con la lectura, ahora estoy buscando elaborar antologías para los de prepa, es todo un reto. Me estoy durmiendo tarde por eso y a decir verdad estoy exhausta. Creo que mañana despertaré a la una o dos de la tarde, pero ¿qué creen? debo armar mis antologías, sacar las benditas fotocopias y eso requiere la mañana, así que tendré que esperar al domingo. Scheisse!

Adiós, ma chère amante des fêtes atascadas
Cuidar la imagen pública me parece ridículo, absurdo porque me ha costado trabajo llegar a mi condición de tamarindito. Sin embargo, ahora convivo con adolescentes que, como dije antes, no respetan a nadie y por eso pueden subir cualquier imagen a cualquier blog o puedes encontrarte en youtube cuando menos te lo esperas, porque sus acciones no tienen límite. Valiente cosa, tener que sacrificar lo que soy por estos parias del lenguaje. Anyway, no tengo opción. ¡ A seleccionar fiestas underground! (mmm, pero en Xalapa no hay, ergo, ya no puedo fiestear :p). Así que chicos, si me tienen cariño ya no me etiqueten si me veo de plano muy borracha o echando mucho desmadre. Temo que algún estudiante curioso por buscarme encuentre este material. Ja, creo ando algo paranoica.

(tenía pensado encontrarme con la damita rouge taconeando en tierras queretanas, fumando boleritos y canciones marlango para hablar de ternuritas, oh, de verdad eso sí lo lamento).

Dato curioso. Todos mis estudiantes me preguntan si soy “de aquí” porque dicen “que hablo raro”, mi exilio español ha dejado sus marcas, el problema está en si podré volver a hablar como auténtica jalapeña, me mantengo en la postura que mi lengua ya no será la misma y que por ello no sé hasta cuánto tiempo más seguirán diciéndome que parezco de otro lugar. En un salón tenía muchas ganas de responder la linda frase de mi laulau “soy extranjero de toda la vida”.

Lectura que disfruto ahora: Giros negros de Enrique Serna.

En mi búsqueda de textos para mis alumnos inconscientes de la lengua, encontré unos poemas de Villaurrutia y cuál fue mi sorpresa cuando vi que había subrayado unos versos del poema Amor conduce noi ad una morte:

Amar es una envidia verde y muda,
una sutil y lúcida avaricia.

Amar es una insólita lujuria
y una gula voraz, siempre desierta.

Porque amar es, al fin, una indolencia.

Entonces apareció…

jueves, 14 de agosto de 2008

La hamaca pendiente y tacones madrugada

Mis tamarindos:
Esta mañana he recibido un correo de alguien que consideraba mi amigo cuando esta niña antes de declararse cabaret tenía 12 años y agachaba la cabeza en el pupitre. Era uno de mis mejores amigos, pero el tiempo pasa y algunos cambios hicieron que hubiera una separación necesaria por diferencias que ya llevaban consigo cierto dolor.
Yo tenía 12. Entraba a una secundaria que no quería, el primer día quería llorar (saben que siempre he sido una llorona), entré a esa escuela y sólo quería desaparecer. Una de mis hermanas estaba en esa escuela y ella era famosa por su inteligencia y su talento para el deporte. Yo sólo sabía llorar, mirar a la gente sin hablar con ella y renegaba del deporte porque pensaba que los balones me seguían sólo para darme duros golpes en la cabeza. (Quizá por eso estoy tan loca, ja). Los profesores pensaban que sería como mi hermana, buena en matemáticas, buena para los deportes. Sin embargo lo único que me gustaba era observar porque me sentía incómoda en esa escuela. Por primera vez me di cuenta que las chicas cuando tienen 12 tienen unos gritos tan agudos que pinchan la cabeza y que les gusta a punta de alfiler convidar esas estridencias a los chicos para llamar su atención, dinámica extraña. Eso me resultaba tan ajeno que no creía que tuviese amigos. Sólo sabía vivir momentos de limón y esconderme en cualquier esquina.
Y un buen día, cuando estaba en clase de deportes, un chico me dijo ánimo, tú puedes, y de ahí comenzó la amistad. Él estaba en el grupo B, yo en el A. Es curioso. Mis mejores amigos los conocí en ese grupo, no en el A. Estábamos en el mismo taller, en música, y comenzamos a hablar. Fue un milagro que para segundo de secundaria unieran los grupos A y B porque yo lo pasaba mal. Ya mi vida se encaminaba a que la mayoría de mis mejores amigos fuesen hombres y no mujeres. Tres chicos eran mis amigos, aunque me molestaran como cualquier puberto de esa edad, eran mis amigos, y me querían y tenían paciencia conmigo. Recuerdo cuando teníamos que hacer una representación para la clase de español yme aplaudieron mucho, yo que usaba un vestido de mi madre porque teníamos que ser adultas. Uno de esos tres me filmó en un festival navideño masticando chicle de una manera brutal, y toda su familia vio ese momento de gloria, y qué decir de aquel que me tomó tantas y tantas fotos y deseo que llegue un día que me de todas ellas, para recordar cómo me veía tan puberta y con mis primeros converse azules. Saltábamos en la cancha de basquet y un día me quitaron mis tenis y los colgaron en la canasta. Bueno, ese momento para mí no fue del todo divertido. Esos eran mis tres amigos, a quienes voy a recordar con afecto toda mi vida porque si pude contar con alguien fue con ellos. Recuerdo cuando cumplí los ... 13 o 14 no recuerdo, odiaba las fiestas y era más sombría que un emo. Llegaron y me dieron una serenata ¡a las seis de la tarde! uno llevaba un acordeón (tenía la etapa de experimentación con los instrumentos musicales), y me cantaron las mañanitas. Me pregunto dónde quedó aquella polaroid, esa foto en la que salen los tres con sus gorras intentando ser raperos. A los 15 quise cambiar de escuela, me fui a otra (de la que poseo pocos recuerdos dignos de rescatarse) y un año después uno de ellos, el del correo, se cambió a mi misma prepa. Le decía mi hermano, bailábamos juntos y me gustaba que me levantara, y a veces me cargaba.
No sé cuándo las personas que se quieren cuando cambian de vida o de novia o novio cambian tanto que es imposible continuar el vínculo. Eso me pasó. Aún hubo intentos de amistad, durante la universidad incluso, pero había una distancia que no podía alcanzar. Fue difícil porque le apreciaba.
¿Qué fue de ese trío maravilloso que hizo feliz mis momentos de secundaria? bueno, con uno ya no tengo ningún tipo de contacto, simplemente la distancia, las carreras, se acabó. Al que tomaba fotos y le gustaba el acordeón le aprecio mucho, es un chico muy feliz, felizmente casado y hablo con él por chat de vez en cuando. Tal vez un día le dedicaré una entrada. Y el tercero, el de la fractura, pues sólo ese correo. Fueron únicamente dos líneas, y no puedo ser indiferente. Me escribió porque una paciente nació el mismo día y el mismo año que yo, y lo recordó, y me envió el correo. No sé en qué momento dejé de quererlo como el primer amigo que he tenido en mis 26 años.
(salta, salta, pequeña langosta). Mis tiempos de secundaria, cuando suspiraba chicos grunge y estaba en el taller de canto.
Hablando de reencuentros. Una chica de la prepa. A veces me sorprende porqué a la gente le da gusto verme. Pienso llamarle, porqué no, sería lindo saber qué ha sido de su vida.
Mi reencuentro con la ciudad va con giros silenciosos a Madrid, con saltos a la convivencia con los padres porque el porvenir ha decidido jugar a las escondidas conmigo. Me asomo mucho al pasado chicos, pero no para llorar. Y ahora esto me da un codazo para que caiga en una hamaca, para poder balancearme a gusto con lo que quedó de mi adolescencia (la cual advierto la mantengo mentalmente), con mi vida xalapeña y sobre todo con mi pasado, izquierda, derecha, hay que bajar la guardia porque el golpe puede ser suave, como cuando se acaricia a los niños pequeños sacudiendo sus cabezas cuando hacen alguna broma. Y aparecen los papelitos del muro de la escuela que no se han despegado, a pesar de la volubilidad del aire y de los años.
Los tacones son presagios de la amplitud y del riesgo
Por alguna razón encuentro en los tacones mi nueva diversión. Si camino con ellos las distancias son cortas, ningún cruce de calle es tan peligroso como parece y me miro tan ajena que me gusta mucho esa extraña tamarindera que comienza a pregonar con un vestido golpes para arrancar de la vida sus racimos de juventud.
Los dejaré otro día más con el suspenso de la nueva foto que creo que dará como se debe, el tono inicial de mi cabaret.

lunes, 11 de agosto de 2008

Sin charcos y sin espejos. Un apunte sobre la entrada 2

El gran paréntesis dichoso
(Productividad de un desempleado: la escritura.
Mientras no encuentro nada, me siento bien por estar escribiendo, bueno, mejor estos ejercicios que ver la televisión a esta hora. Nunca atino en qué momento transmiten las olimpiadas).

Quisiera hacer una aclaración. Me parece que no todos mis lectores han comprendido del todo mi necesidad de otros diálogos en lugar de leer como acostumbraba.
No tengo NINGÚN CONFLICTO con los libros, no estoy renegando el diálogo literario. Tengo más clara mi afinidad con las letras que cuando estaba desesperada leyendo en la universidad. Espero que la siguiente comparación sea más clara al respecto.
Siempre se acude a los amigos queridos. Si viven en tu misma ciudad haces lo posible por visitarlos, por quedar con ellos, si están lejos les escribes, chateas, les llamas a altas horas de la madrugada cuando estás borracho o a horas consideradas como permitidas por el simple placer de tener contacto con la voz que se aprecia. Sin embargo las vidas de los amigos como la suya pasa por momentos de cólera, por tiempos de alejamiento, y esto no quiere decir que la amistad se ha perdido. No sólo nos distanciamos de la gente que queremos porque hayamos tenido una discusión o porque “ya nos dé hueva” (me han dicho que ya se puede acentuar, así que no lo hago por ignorancia guys :p). Nos alejamos porque muchas veces es necesario, porque queremos saber lo que se siente columpiarse sin necesidad de alguien que te empuje. El impulso, el cálculo del aire a veces debe ser para uno solo. Es un alegre descanso. No es necesaria ninguna conciliación porque nunca hubo disputa. Así que… ¿quedó claro? Cada quien su relación con los libros, por el momento esta es la mía, y me gusta que por el momento sea a distancia. Amada siempre.

Para relajarnos un poquito y para mostrarles lo contenta que estoy, pondré una canción que me pone de muy buen humor. Atomic love de los beatsteaks, oh, gracias Mirjam y Chris por pasarme algunas rolitas. La pienso cuando estoy en el parque dando mis vueltas reglamentarias. A veces se me permite ponerla en el coche (por favor, díganme cuándo se creó la porquería de los Jonas Brothers, es uno de esos momentos en los que quisiera volver a mi exilio español, oh, lo que daría para que mi querida carnalita tirara ese puto disco de mierda y perdónenme las malas palabras), lo cual ya es mucho, y me siento feliz, aunque ya no aguante la humedad jalapeña y tenga la blusa no entallada, sino encarnada a la espalda.

Otro día charlaremos de rolitas.
Y hablando de eso. Una ternurita del df me debe un cd :p, si lo lees, tú, tú mi chilanga ternurita ojalá sientas un pellizco.

P.D. ¡Ya tengo otra pulsera con san beni! oh, qué bueno, de verdad me sentí mal por haberla perdido en Madrid.

sábado, 9 de agosto de 2008

I. Mi desempleo no me impide la lectura, pero me hace pensar que ahora debo desgranar el aire

Segunda entrada



Mi segunda tanda de queridos lectores. Primero doy gracias por los comentarios, por su curiosidad, espero continúe de vez en vez y me acompañen en este periodo movedizo. Ya pienso en las siguientes encuestas.
Desde que llegué aquí casi no abro los libros. Me consuelo un poco con un par de poetas argentinos de vez en cuando y demoro el final de lo que le pasará a Vassili Evangelisto quien estoy segura no errará en el laberinto inextricable del tiempo (en palabras de su creador, Maxence Fermine) sino que conseguirá lo que nosotros no, perderse en él, hundirse dichoso en él, es decir, estará en lo que yo no conozco (bueno, creo que a veces paso de lado): la plenitud. No termino esta novela porque es el único libro en francés que traje de mi pobre biblioteca que me queda por no leer, y porque temo perder la comprensión de lo poco aprendido. Oh, sí, lo que más temo es un día olvidar por completo mes connaissances de la langue française. No es cuestión de vanidad, sino de gusto. Pienso que mi trabajo me costó estar dos años traduciendo y confundiéndome con el español-castellano para darme cuenta una mañana que ¡híjole, esto ya valió gaver y lo perdí! ¿Cuál es mi solución? postergar, postergar.
Hace poco hablaba con un amigo muy querido sobre las lecturas. En este momento él se encuentra dialogando más que nunca con los libros y tal era su ánimo que me preguntó “¿qué lees ahora?” bueno, mi respuesta ya la saben, la he citado arriba. La lectura ha sido uno de mis males, como el tuyo, como el suyo, como el de algunos de ustedes y como el de mon cher Vila-Matas. Cuántas noches no leí, mi vista cada vez es más inútil para reconocer a distancia una a de una p y un cartel puede ser una serie de manchas que lo único que quieren es la anulación. Cuántas veces no estaba en un bus o en un avión leyendo y a veces gritaba en mi recámara porque no podía creer lo que iba a pasar a los personajes.
Ahora damas y caballeros lo que quiero es desgranar el aire, perderme en el bullicio de las fiestas, escuchar las historias de mi madre, caminar-correr en el parque antes de las nueve de la mañana. Es como si quisiera entablar una nueva conversación con estos años torcidamente vividos, como si estuviera una noche en la sala El Sol moviéndome como si siempre fuera la primera canción. Tengo la ansiedad de lo que cuentan los demás, de las miradas de los demás. Es una pausa necesaria.
Cuando este paréntesis surge, por alguna inexplicable razón (lo reconozco, mejor rectifico, por una explicable anti-razón) lo que quiero es escribir y llega voraz, y ya no tengo cabeza para otra cosa, sólo en líneas sucesivas. Y así me pongo a trabajar. Así que estoy armando algo otra vez. Mis recesos son los amigos, la familia y por supuesto, mi incesante búsqueda de empleo.
¿Acaso esto formará parte de las acciones de un desempleado? júzguenlo ustedes mismos.

II. El resabio de la fiestera
Si saben de alguna buena fiesta, no duden en decirme :p, esto también es un elemento importante para el mantenimiento de mi formación no académica.

(Mirjam, Laulau, he escrito algo pensando en la sala sol)

A ver si puedo conseguirlo de ahora en adelante, pero me gustaría terminar pensando en Remembering de Avishai Cohen (rolita que le agradezco a mi cuate norueguín y la compartí con dos chicos ternurita). En este momento busco más música que libros, y rastreo más mis cd que las hojas de los argentinos que me esperan. Es sutil, y parece contara cómo alguien va en un taxi, y no mira atrás lo que deja, no por indiferencia o dolor, sólo está el aire que entra poderoso, y sacude y posterga con giro animal los recuerdos.

P.D. Dos amigos me han hecho una observación sobre mi anterior entrada. Prometo reflexionar sobre la utilidad del youtube, y en cuanto tenga comentarios sobre mi indagación, los escribiré.

P.D. 2 Cuando tenga tiempo, haré entradas más cortas en español e inglés, porque cierta persona tiene curiosidad por leer mi blog :p, así que no vayan a burlarse por mis intentos de escupir en otra lengua mis pensamientos lorenescos. Se aceptarán correcciones y sugerencias :D.

viernes, 8 de agosto de 2008

I don't care as long as you sing. Mejor vivir la hueva que renegar de ella

Día primero de la no invisibilidad. Me sacudo mi afición por el anonimato y les ofrezco a mis curiosos primeros lectores la oportunidad de que puedan matar un poco el tiempo mientras están en sus trabajos (lo que aún no tengo), o simplemente porque les gusta estar frente a una computadora y pretender "que están haciendo algo" porque recuerden: el youtube no es búsqueda de información, je. Comienzo a preguntarme los motivos de mi regreso, de porqué no hice todo lo posible por permanecer en Madrid, y me lo pregunto por los empujones que me dan los amigos de mis padres, quienes son los artífices de que por instantes no disfrute de mi regreso a México, jajaja. Lo que echo más de menos es la convivencia, poder sentirme a gusto tendida en un sofá toda cruda mientras otros salen o están peor que yo. Echo de menos la complicidad estudiantil, "el taponeo", caminar a altas horas de la noche todo pedo riendo a manos llenas sin motivo, buscar con gusto un asiento en el metro después de las seis de la mañana por las horas que estaba bailando. Echo de menos la pequeña independencia, y el desenfado adquirido con los amigos y extraños. Me pregunto si podré quedarme con eso, si será lo único que voy a tener por la residencia ahora perdida.
Lo que me queda un poco más claro es que ciertas presencias no estarán conmigo. No tendré a un Marcos que me escuche después de las dos y le diga mal queda, no estará una Rosi que me eche porras y espero siempre me recuerde sus frases madrileñas, no habrá un Cam que me hará recordar porqué es tan divertido emborracharse, no habrá una Carmen italiana que me dirá que muestre más las tetas (aquí prefieren ocultarse) ni un Chris que me imite cuando estoy triste. Franzi ya no dará sus palmaditas, Carmen Alemania no cantará peda el "cielito lindo", Lena no me ofrecerá chocolates, no habrá un Marito que diga "me vale tan madres", y siempre me parecerá vacía la pista de baile o el baile en antro porque mi pequeña Mirjam no echará desmadre conmigo. Sin embargo esto no es para ponerse triste. Mi pequeño universo de Villagarcía 4 C está aquí, dispuesto a acompañarme cada vez que escribo un mail para pedir chamba y que están con mis cuates mexicanos a quienes ya extrañaba y adoro también. Los llevaré a mis fiestas, a todos (si es que aquí encontraré alguna buena fiesta :p), para que me recuerden la Lorena de aquel pequeño piso de Batán que supo aprender a beber con dignidad y a bailar como una loca. Tal vez esto fue un motivo para perder el tiempo escribiendo "a no sé quién para no sé qué". A ellos este primer día, mi primera entrada.