lunes, 16 de noviembre de 2009

La tonada de Irving

Cuando entré a Informática estaba ahí. Comenzaron a cantar. Más tarde Manuel me dijo "yo creo que le agradas. No canta cuando otros entran". Me pidió hace una semana si podía adoptarme como su hermanita "la más bonita". Él hace el piso más humano.

Esta es la canción que me cantó

martes, 3 de noviembre de 2009

Rinofaringitis viral

Desconozco si fue el temporal  montaña rusa, el clima de la oficina o el fracaso de Jovita por cuidarnos de su padecimiento. Ayer comencé a sentirme sin ánimo de pinchear a las chicas de Apoyo Logístico -cosa rara, muy rara- y mi garganta tenía a un gatito afilando sus garritas, rodée mi garganta con mi usual sierpe morada de Penélope Clau, pensé "ya está". El lic Aragorn me dejó partir temprano de la oficina y sólo quise dormir. Esta mañana las sábanas eran de plomo, mi cabeza un aeróstato a punto de contraer violentas nupcias con las rocas y el felino que reconocía el filo de sus uñas las usó para su pintura rupestre. Rinofaringitis viral, eso dice mi justificante médico. Mi nariz tiene canales obstruidos, la sibilancia asmática atormenta a mi pecho con sus cigarras y no puedo hablar, toco el cuello y me duele tal seña de alguna liga que durante días no me dejó respirar. Si no tengo fiebre podré regresar al parque a caminar-correr en tres o cinco días. Para tal efecto debo reposar, mínimo, dos días.
Si hubiese ido a la oficina  a mediodía con mis ojeras más profusas y mi aspecto de Catrina atolondrada ostentando un cubrebocas, la alarma ¡influenza, este piso es zona de influenza! se hubiese anticipado a los pasos que me faltan para entrar a Secretaría Técnica. La psicosis colectiva del AH1N1 es el segundo polvo que cubre nuestras sillas y escritorios -"según" dos personas fueron pilladas por el virus y la pobre de Jovis anduvo mal de la garganta una semana, tuvo que mostrar su receta médica como gafete para que la rdejaran trabajar porque "¿qué voy a hacer en la casa? no me voy a quedar en cama, voy a limpiar o a tejer", oh, pocas como Jovita-, de hecho los choferes colocaron el letrero de "zona de influenza". Sin embargo mi ausencia podría pie a la maledicencia : "Claro, no viene porque tenemos el evento encima", no suelo ser semejante pedazo de cabrona y si algo tengo es mi tendencia a ser workaholic, en fin, debo descansar un día más y punto.
Casi son las dos de la tarde y les digo que no consigo reposar del todo. Mientras esperaba mi turno para consulta médica, había un par de niños. Uno tendría cuatro años, el otro estaba aprendiendo a caminar. Se observaron con sigilo. Siempre hay uno que muestra mayor curiosidad, éste avanzó, el otro fingió desinterés. Pasó un rato y el indiferente empezó a buscar al que llamaba la atención a base de sentones y congestionada risita, se miraron por instantes, alguien se anticipó con la primera travesura -hay que retener la atención de algún modo-, rieron, molestaron a sus madres con berrinches y golpes, luego volvieron a buscarse. Cuando era niña ir al doctor era acudir a un cuarto repleto de una legión violenta y fascinante: cualquiera podía ser mi amigo fugaz o mi éfimero enemigo, con sólo mirarlo, con sólo excusar y reprobar sus gritos, sus cantos o sus movimientos desmesurados. Resulta ser un bocado de las relaciones humanas, como si el otro estuviera hecho  de una plastilina tibia, suave y manoseada que resulta abyecta pero irremediablemente atractiva.

Por el momento reviviré mis años mozos cuando no tenía tele por cable y veía pelis mexicanas. Veré El santo contra las lobas o La ilusión viaja en tranvía, me asomaré a algún texto o revisaré mis traducciones como se debe, porque si veo más las noticias incrementará la tos.


sábado, 10 de octubre de 2009

Curiosidades de la abuela

1. Enseña lo que puedas. Estás en edad
2. Arréglate para ver si ya pescas algo, para que le des a tus papás su primer nieto.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

In Memoriam. Mario Merlino parte I

Hace poco me enteré que uno de mis profesores del máster falleció. Amante de la literatura, sobre todo de la poesía, de la traducción de poesía, convirtió nuestra asignatura de taller de redacción en taller literario. Teníamos que hacer cuentos a partir de datos que nos daba. En una ocasión nos dijo que intentáramos describir un color sin decir textualmente: "azul: el mar".
Mi amiga ex colega francesa nos comunicó esta noticia, me sorprendió, de verdad. Me hubiera gustado que este profesor, Argentino por cierto, nos comentara sobre nuestros trabajos; tenía ganas de saberlo. Sus clases a veces eran divertidas, otras no tanto.
 Agrego tal cual el texto referente al color que hice en su clase, mal hecho, mal trabajado; encontrarán inconsistencias, pero quise dejarlo así, tal como se lo entregué en mayo del 2008.

Mario, seguro no descansas, andas alegre, por ahí, haciendo cosas.

ADVERTENCIA: ES TEXTO LARGO... ¡SE AGUANTAN!

A veces iluminas y siempre te multiplicas. Primero, tu curso rinde homenaje a la vida y en ella te viertes, saltando, huyendo de tu cauce, gritando en tu silencio. Tu pureza es sótano para la virgen, ventanal para el desesperado, alfombra para el caído. A veces iluminas porque nadie puede dejar de mirarte. Las mujeres te utilizan como telón para abrasarse en el delirio o al menos en la mirada del otro. Puedes ser los párpados del ciego o la pupila del ebrio. Participas en el nacimiento, en la palabra que se dice en el vagido, en quien emerge y en quien se ha rendido al exhalar al viviente. Has teñido las cosas del principio y por ello apareces como la amenaza o el ruido en los dibujos. Tienes enemigos. El luto te da la espalda para arrullar a los difuntos, la amargura cierra las puertas de su casa para no dejar pasar tu perfume, las abuelas no te ciñen porque al olvidar lo que un día fue el sabor del rapto en labios de sandía, prefieren la serenidad y la resignación del gris y del negro, para los hospitales eres tabú, la plegaria te oculta porque para ella la vida no es tu río sino la luz que no puede abarcarse, incluso la vida misma corre en reversa por temor a que te escurras y que también ella se escurra en los peñascos. Ella no confía del todo en ti, pero te busca, te busca. Condenas a la rosa, la obligas a la fugacidad de los amantes. Los niños se asombran contigo, te prueban, te aplastan, sumergen sus dedos en todas tus formas porque siempre te multiplicas. Eres la tercera parte de lo que ondea en los mástiles, para algunas naciones eres el signo de la lucha, de la decadencia o incluso de la maldad. A veces iluminas, pero también irrumpes y callas en la tristeza. Porque también apagas. Finalizas la risa por brotar en el surco de algún labio, cuando te buscan los filos y las balas. Te piensan en la antesala del infierno, si es que existe, como atavío de los demonios, si es que viven. Ni siquiera puedes eludirte a ti mismo, vives condenado a tu extravagancia. Ya en la manzana o en la fresa, conoces los labios y extraes la vida con tu zumo. Desconciertas, orillas a la timidez a desnudarse. Estabas en mis tenis de la adolescencia, y fuiste en ellos la aversión de mi madre. Vives en los vestidos del danzón y sueles seducir en tacones. Te pienso hoguera del flamenco, donde cada ruptura aúlla, da fuerza para arrancar las penas del día, donde guardo los recuerdos de las noches en el vapor de voces muriendo y naciendo a contragolpes, porque ahí te veía, porque esas cosas las comprendes, porque tu cuerpo es despertar, galopar hacia otros centros y perderse apagándose en tus llamas. Porque se trata de ti, permanencia que nos balancea en la ebriedad de sabernos por fortuna o por desgracia, mortales por ser la sangre una de tantas que te emulan:

(COLOR ROJO)


martes, 22 de septiembre de 2009

El mejor poema que me han dado

Desde Londres para el mundo, el mejor poema que me han compartido:

Horses are big
Rabbits are small
Leopards are fit
Snails are slow
I like everything that walks or crawls
just no snakes; one bit my balls
-- Alastair Goldbloom

lunes, 7 de septiembre de 2009

Afirmo categóricamente: no me gusta septiembre

Septiembre nunca me ha gustado. Desde la niñez este mes suele abrazarme con una nostalgia que se aloja como un puño en mi pecho. Ya sentía en quinto de primaria su balanceo en el interior, desesperado, con un sentido del humor cuyo contacto no conseguí entender del todo. Entonces -en esos balcones de la Rébsamen, después de mis rondas con una compañera o simplemente sola- una ansiedad me corroía porque sentía que nunca podría alcanzar a la vida del todo, y que la península prometida -la felicidad- era el espejismo de una niña sosa en medio del desierto. En la secundaria, en la prepa y en la universidad ocurrió lo mismo. No veía con agrado el nuevo ciclo escolar porque ya sentía el rumor de sus heraldos para después tomarme de los brazos y despertar esos nudillos que gustan contemplar mi desazón.  Por lo tanto los balcones de la HAF, la Oficial B y el edificio F -si mal no recuerdo- de humanidades fueron su sillón y mi orilla. Ahí septiembre, tranquilamente recostado, a la espera de mi gesto patidifuso. Ahí yo, imaginando una barquita varada para intentar lanzarme inútilmente al mar. Eso, sólo el principio.
A partir del día diez aparecen los suspiros. La exhalación suelta hologramas de asombroso parecido con mis recuerdos, lo más felices, los rostros que besé con ternura y en donde proyecté el temblor más de una noche, el roce del arrebato, el perfume a madera y húmedas hojas, el paso equilibrado por una boca que sólo conocía la risa. Este noveno mes del año me atormenta con voz de Jeff Buckley, sólo me canta Lilac Wine y Lover, You should have come over como si fuesen sus himnos. Adoro a Buckley, pero en esos treinta días no es el indicado, no es el indicado.
(Olviden la distracción de las fiestas patrias, no funciona esa válvula de escape. Es torpe, acumula más desatinos y resacas, reconozco que el año pasado produjo un buen error, pero huidizo al fin, placebo al fin, ninguna cura, ningún alivio).
Septiembre es Medusa, Escila y Caribdis, el dragón que tuvo que enfrentar Tristán. Días de prolíficos insomnios y tirones de cabellera. Para colmo este año, este mes me trae más sorpresas: me voltea la cara para no olvidar que M. al final no vino;  las respuestas no obtenidas; la lluvia que impide los paseos y convierte en pandemia inhalar-exhalar; la intención, otra vez frustrada, de un encuentro entre la arena y la tundra, gran suspiro por aquel lugar que pensaba hace más de diez años; la noticia que otro buen elemento, el buen P., se va de este lugar de montaña para volver a beber el calor y para confrontar a los tábanos.
When I think more that I want to think
Do things I never should do
I drink much more that I ought to drink
Because it brings me back you
Buckley no pudo cantarlo mejor. Septiembre no pudo haber encontrado intérprete mejor, pero me entristece.
Pobre corazón de abrevadero... je ne peux pas trouver trace de toi.
That's why I don't like september at all!!

martes, 25 de agosto de 2009

Caballo tercero. Su perfil y su galope




Nómadas son tus párpados, quietud,
crótalos anegados de figuras invidentes
-de papel las mira siempre el aire-,
confrontas rubia la ajada voz de tarde
como si desearas perder en la brida
tus iniciales,
seña del jinete.

Lorena Huitrón

viernes, 21 de agosto de 2009

Una temporada en la biblioteca. Primera parte



Hoy es mi último día. Así quiero despedirme:



Sala braille

Semana número cuatro,
el escritorio tiene ya tu polvo, tus marcas.
Confrontas la pared, descubres
los obsequios olvidados
de visitantes recurrentes:
una que otra araña deja sus retazos,
una que otra araña decide patinar
sobre tus hojas
quizá porque conocen la ausencia
de invitados a tu mesa.




Súbita ceguera (consequence d’un soleil et d’un corps)

La presencia de la luz es contundente. Ninguna atalaya encubre al hombre muerto en tiempo, próximo a distender a puños blancos esta memoria que agita, desconoce la trayectoria del resto de los cuerpos, abandona de golpe las pocas posesiones, desarmando al ojo, pidiéndole mendigar al último de los claros.


Y cuando deje mi tarjeta ya checada y firmada por última vez, esto va a sonar en mi cabeza:

http://www.youtube.com/watch?v=ofRCldHb7X0

(Estoy contenta)

miércoles, 19 de agosto de 2009

2 días




Mi discreción en este lugar resulta imposible. Mi jefa me fastidia -pues sabe que me faltan dos días y no volveré a levantarme a las cinco y veinte de la mañana-, y lo hará hasta el viernes, eso seguro.

domingo, 16 de agosto de 2009

Woolf avait raison -más gajos para arrojar desde la ventana-

"Pero para que entiendas, para darte mi vida, tengo que contarte un cuento; y hay tantos y tantos cuentos: cuentos de infancia, cuentos de la escuela, amor, matrimonio, muerte, etc., y ninguno de ellos es verdad. Pero, como niños, nos contamos cuentos, y para embellecerlos construimos esas frases hermosas, floridas, ridículas. ¡Qué cansado estoy de los cuentos!, ¡qué cansado estoy de las frases que descienden con hermosura y posan los pies en la tierra! Y también, qué desconfianza me inspiran los pulcros argumentos biográficos que se anotan en cuartillas de papel de notas. Comienzo a desear algún lenguaje elemental como el que utilizan los enamorados, palabras sueltas, palabras inarticuladas, como el arrastrar de los pies sobre las aceras. Comienzo a buscar un argumento más acorde con aquellos momentos de humillación y triunfo que innegablemente vienen de vez en cuando."
[...] "Y en mí también sube la ola. Crece, sube la cresta. Soy consciente una vez más de un nuevo deseo, algo que se levanta en mi interior como un caballo orgulloso a quien su jinete primero espolea y después frena. Tú, sobre quien cabalgo ahora, mientras golpeas la acera con las pezuñas, ¿qué enemigo advertimos que viene hacia nosotros? Es la muerte. La muerte es el enemigo. Es la muerte contra la que cabalgo lanza en ristre y cabello al viento, como un joven..."
Virginia Woolf, Las olas

jueves, 13 de agosto de 2009

Sometimes Saints like helping twisted-"tamarindini" girls

I was running. I had 20 pesos in my pocket. When I finished, I put my hand inside it and the money was gone. I was running-walking to find it. Suddenly I remembered when my mother told me : everytime you loose something, just ask San Antonio, he'll help you, so, I was there asking my bill to a man I've never known, "San Antonio, please, I want my money back, please, let me find it".

Lost & found

As soon as I found it, I said at loud "¡Gracias San Antonio!" Some people were near and obviously they looked at me if I were a complete freak, anyway, I felt happy. When I came back home I told my mother about it. She told me " I told you Lorena! he really makes miracles! Now you have to pay him 13 coins for each thing you've lost". I have 3 days to pay him back...

domingo, 26 de julio de 2009

Ai no kawaki

He comenzado a imaginar que el corazón es una vasta extensión donde hay campos de cerezos y más allá, cuando los pasos alcanzan a perderse por desesperación existen árboles semejantes a un osario, luminoso por su resignado mutismo, admirable por dormir sosegado entre la palidez de su ruina. Y hay otra dirección, un sonido persistente, que solicita acudamos para acallar nuestras alegrías y miserias; quizá es el oleaje sin peces, o la espuma sobre arena aterida.
Para llegar al jardín de los cerezos basta ir galopando, engullir el aire dejando el temor de ser extraño y difuso ante el resto de los hombres, sin necesidad de gritar palabras que muerden la lengua, sacan una diáfana línea de arrebol que somete al rostro, venciéndolo. Basta sentir esa caricia, esa pausa en la que el cuerpo queda transparente en su interior, limpio, al fin liberado de sí mismo, olvidándose de la brida.
Pisar la playa, acercándose a la orilla, mojar los dedos tan sólo, es la recuperación absoluta de la pérdida del horizonte, en donde olvidamos nuestra pesada materia, ese límite que entorpece cuando tememos a cantos que, al fin y al cabo, es llanto de recién nacido.
Pero la llanura está siempre a dos pasos, al golpearnos a propósito, al pensar que no hay senda sin trazos de cardenales en los brazos. Sólo basta hablar, balbucear cuánto tememos al otro, sintiendo una serie de aspas en el pecho que nos obligan, irremediablemente, a convertir nuestros labios en enemigos.

viernes, 24 de julio de 2009

Caballo segundo (o búsqueda del punto 22 en el pecho según Vers)

Galloping is making the thunder edible even if the bridle wants to hide
his nudity.
A storm is coming. The sound of leaves warns about corpses breathing and with their mouth open, the purity of their teeth sticks on a river without land and my heart keeps riding to nowhere.

miércoles, 22 de julio de 2009

Serie dame de nage

Caballo primero

Desbocado.
Separado del resto, el aire no le alcanza, el mediodía no le sostiene el paso. Al menos la agudeza del relincho no es palabra, sólo arpón dirigido al pecho.

domingo, 19 de julio de 2009

3 more weeks

Escribir no es búsqueda.
Es impertinencia o la invención de un mapa
o simplemente el impulso
de una mente compleja
por desconectarse lo más pronto posible
de los días que lamentablemente proliferan.

Francisco Hernández, La isla de las breves ausencias

sábado, 4 de julio de 2009

Un año definitivo, un año multiplicado. Adios Madrid

Regresé hace un año.

No haré recuento, ni voy a quejarme. Resumo con un poema de mi amado Char, poema que me he atrevido a traducir.

En guardia

En nuestra templada vertiente tenemos una serie de canciones que nos flanquean, alas comunicantes entre nuestro tranquilo soplo y nuestra fiebre más intensa. Piezas casi banales, de tenue color, de silueta tardía, cuyo tejido lleva sin embargo una minúscula herida. Es permisible que cada uno le ponga un principio y un fin a este dudoso rubor.
En un tiempo donde la muerte, dócil de brujos farsantes, deshonra la mejor oportunidad, no dudamos liberar todos los instantes que tenemos. O mejor, giramos hacia el arbusto, esa enredadera que la última hora de la noche afina y entreabre, pero que el mediodía condena a cerrar. Extraordinario sería que la quietud, detrás de la que apenas nos acurrucamos, no fuese la que hubiéramos querido por una siesta.

traducción de Lorena Huitrón

martes, 30 de junio de 2009

Abuelo : encontré una estrategia no tan secreta para votar

Fer, durante estos doce meses doña Li resiente los años en sus piernas, busca un bálsamo para acallar la amplitud de la casa cuyo único espacio que no conoce la oquedad es el buró en que se encuentra la cajita de madera donde residen tus cenizas y se queja a menudo de tus antiguas decisiones, que, insiste, la perjudicaron. No te fijes, más adelante podrán hacer el ajuste de cuentas. Por otro lado suspira, a intervalos poderosamente regulares a tu hija Lu, quien recuesta su dolor por la mañana y es sabido por sus hijas, tus nietas, que su pecho solamente puede barrer la hojarasca, ya que no puede contra el escarabajo de tu pérdida, incrustada en su pecho para adornarla y acompañarla, no se va porque es lo único que la aproxima a ti -eso piensa-. En este momento se dirige a verte, no la culpes, no aguanta el llanto, eso sí, repréndela, es un favor especial, pues se esfuerza a ratos para atragantar ese gris, leal compañero mortal, que le exige nomadismo a la sonrisa y vuelve permanente al rictus de la herida, nacimiento de más raíces para la tristeza. Repréndela, porque sólo puedo tenderle los brazos, torpes siempre, pues materia desconocida resulta para mí su corazón.
Sobre el resto de tus hijos... mejor... imagínalos como un par de muros de contención, uno frente a otro, cimbrados sobre un campo minado.

Conviene que pienses de mí -no sé si consiga engañarte-, que en general soy mesurada y poseo un grado excepcional de sensatez, y por ello quiero contarte lo que haré este domingo de elecciones. Como la historia política de nuestro país se resume en "la única orientación son mis intereses monetarios, me importa un carajo el país, quiero camionetas último modelo, jugosos viáticos, casas grandes, exorbitantes cuentas bancarias, total, porque, quién dijo que México alberga a pobretones, yo no lo soy", y como los candidatos a diputados federales están totalmente de acuerdo en lo que acabo de escribir, iré a la urna y en mi papeleta dibujaré un árbol como los que hacía cuando estaba en el jardín de niños -no estoy de humor para poner una carita feliz-, aún no estoy segura si lo adornaré con manzanitas, pero eso sí, con mucho pasto y flores. Ahora intento convencer a una de mis compañeras de trabajo para que escriba-confiese su amor por un actorcillo que balbucea en una novela que sale en la televisora que no te gustaba, y que dice, lo digo textualmente y espero no te importe, "está bieeen buenooo" , así que le dije, oye, es tu opotunidad para que escribas me encanta William Levy.

¿O prefieres que vote por algún ambicioso? Tal vez soy muy radical, pero sería divertido ¿no te parece?

El resto de los acontecimientos, acaecidos durante este año, dejan mucho que desear, y no quiero que te lamentes o te sientas aliviado porque no te encuentras por aquí. Mejor, si estás acompañado, espero puedas hacer lo que tanto te gustaba, jugar golf y decirle a la gente que coma fruta, que es buena para la salud.

Claro, sí te echo de menos, pero no quiero ponerme sentimental.

lunes, 8 de junio de 2009

La outsider de Alsace

Post dedicado a Pac y a F...


Revisando algunos mapas, Alsacia-Lorena se asemeja a un intestino, incluso, si queremos moldear nubes a nuestro gusto, parece el Estado de Veracruz muy pero muy mal dibujado, un poquito cóncavo, como si sobreviviese a una cruda.
Son muy pocos los datos, y la historia resulta poco interesante. Como generalidad este-estos territorios siempre estuvieron en disputa entre Alemania y Francia, así que de ahí la dualidad -aunque me atrevería a decir carácter cuádruple- de su nombre : Elsass-Lothringen/Alsace-Lorraine. Es, a mi parecer, lo rescatable dado que fue sitio de firma de tratados, fue cedido-robado durante un siglo y los habitantes nunca fueron del todo nacionales, sino marginales y extranjeros. Por ejemplo durante el siglo XIX hubo políticas represoras para no hablar alemán.
Sin embargo Lorena fue siempre territorio más francés, importante por el hierro, y , según la historia, en 1914 "fue sitio de duras batallas".
Por otro lado resulta gracioso advertir que los libros de historia no se ponen de acuerdo en separar a Alsace de Lorraine, en los índices onomásticos aparece Alsacia-Lorena, Alsacia, Lorena; los datos no resultan distintos. Me parece absurdo. El guión resulta ser una alianza endeble y caprichosa entre estas dos regiones.
Para colmo, ninguno de los libros consultados por esta tamarinda refuta o confirma lo que dice Wikipedia: Lorena ahora se conoce como Mosella... ¿Mosella? suena como fruto pisoteado por caballos que van de cacería, oh my god... no no no, no confío en la Wiki.
Mis padres nunca consideraron dicho background para nombrarme, de hecho, si lo hubiesen tomado en cuenta, intentarían justificar mis cambios de humor, enérgico-beligerante/ sosegado-vencido, mis anexiones a diferentes posturas intelectuales que apuntan a la dispersión por no llegar a enraizarme a alguna, mi consecuente sentimiento recurrente de marginalidad, mi perfume a dichosa extranjería, mi inclinación por la lengua francesa y mis antiguas alianzas filiales y amorosas con alemanes.
Para algunos el nombre no resulta determinante, para otros nombrar es querer ser mago, trazar un derrotero con un determinado número de árboles, piedras, un acantilado y la aparición momentánea y sucesiva de luz y borrascas. No culpo y mucho menos cuestiono la elección de mi familia, pero mi madre quería que mi segundo nombre fuese Alicia, y si atendemos un poco al sonido, surge un rastro de su entrañable y antiguo coetáneo. Aplausos para Guillermo. Sin su negación a que me pusiesen una segunda denominación en este instante no escribiría tontos posts, estaría en un psiquiátrico.
Por último, como dato a mi parecer gracioso, navegando en la internet, encontré el bellísimo château d'Adoménil situado en mi tocaya región:
La luz de la Lorena dora los artesonados mientras, en el exterior, los patos se deslizan por las tranquilas aguas de los fosos.
Como si pudiese iluminar lagos...

viernes, 22 de mayo de 2009

Pursuit of happiness. Part I -the broken one-



1. Como diría Petrarca : de mis perros huyo todavía
En la incomodidad del escritorio, entre libros de pedagogía, maltrechos y nunca revisados, la mujer sentada frente a mí me tose su ruin existencia. Peor que las bacterias que según arrojamos cuando la ch sale por boca y nariz, el virus extendido es la miseria. Y yo la acojo y la comparto, extiendo mi desazón en estornudos aunque no violente a los demás con mi mal humor y mis frustraciones como ella, ya que mi desaliento al continuar sin pago, mi paso invisible y doblemente pisado -si hay alguna redundancia que pueda valerse por si sola o acompañada- cabalga sin brida por la malhabida burocracia y el sindicato que vomito mentalmente. Y hay que sonreir, para que te hagan caso. Nunca fue tan horrible tensar las comisuras.
Cada quien sobrevive a su manera. La angustia debería afiliarse a los demás con otras herramientas, ya sabemos las esquinas donde alguien -nuestro alter siniestro- nos hace moretones cuando callamos. El baile resulta mi primera posibilidad, bueno, siempre está la música, no importa la elección del beat.
2. El planteamiento Sumano
El horno no está para bollos, le dije un día que le llamé por teléfono al no tener dinero para muchas chelas, y al día siguiente me envió un mensaje a mi celular pidiéndole le respondiera por qué bollos y no otra cosa. Mi respuesta no lo satisfizo, como siempre. Ésta fue: el horno no está para bollos por que los niños prefieron que su madre les hiciera galletas, de esas grandes con chispas de chocolate, por que siempre tienen la última palabra. Ahora, las causas de la exclusión de los bollos fue la gana de las chispas de chocolate en materia un poco más sólida para remojarlas con leche y disfrutar el crujido especial, cómo van deshaciéndose en la boca -no juzguemos sus manitas juguetonas si se ensucian-.
En fin, cada quien pone y le quita al horno lo que quiera

jueves, 14 de mayo de 2009

Mahogany thoughts. Yo también fui fan de Pablo Sol

Nota: podría ahondar más sobre el asunto, pero no quiero aburrirlos cabarenautas, debe ser como un término: preciso, conciso y adecuado.
No, no cualquiera puede ser profesor. Algunos se lanzan al ruedo por vocación, y personas como yo, por necesidad, "porque no hay de otra". Cuando comencé a buscar empleo, fue en lo primero que me contrataron -y la primera vez que me despidieron, porque en un trabajo anterior fui yo la que renunció- y el sudor en las manos, el temblor en la voz y en las piernas se hizo presente otra vez -la primera fue cuando en la secundaria tuve que cantar en el festival del 10 de mayo, y como lo dispuso la directora, fue una rola de un grupo del que se burlarían interminablemente de mí-.
"Puede saber mucho, pero no sabe enseñar", esta es una frase ampliamente difundida entre el alumnado, y no resulta una mentira. Cuando estaba en el máster una reconocida traductora, una de tantas profesoras, nunca preparaba sus clases y tampoco hizo por encaminarnos hacia lo que más me gusta, la traducción literaria. Quedé tan enfadada por que el curso que más quería tomar resultó ser una mierda.
Los profesores podemos arruinar directa o indirectamente a los estudiantes de dos formas : 1) Arrebatándoles el encanto de la vocación al proyectar la envidia-frustración 2) Al no tener el profesor la capacidad para transmitir y trasvasar el conocimiento, el estudiante queda totalmente acorralado, impidiendo poder desplazar y desarrollar sus habilidades.
Sin embargo está la contraparte. Los alumnos nos pueden "chingar" de innumerables maneras : con su apatía, con la acarosa manifestación de su mentalidad caótica-impersonal-violenta-inhumana propia de este siglo a través de las faltas al respeto, sus insultos, burlas y sosas quejas con el director por que para todo son víctimas. Hay muchas, las sabemos -alguna vez fuimos alumnos- y otras tantas las hemos padecido en carne propia. Sólo imaginen y añadan imaginariamente a estas líneas todo lo que se les ocurra.
Dado que la cosa es pareja, sólo mencionaré rápidamente algunos personajes que creo no voy a olvidar nunca.
Como alumna recordaré a : la maestra de baile del Colegio Motolinía que gustaba exhibir mi falta de atención ante mis compañeras. Un día me dijo que parecía mayate, pinche vieja, ahora no conoce mis pasos tamarinderos; de la secundaria, la maestra Estela que siempre me motivó a escribir y a leer; en la prepa el espacio es gris puesto que todos los profesores de la Oficial son grises, y de la universidad, algunos de mis pocos lectores los conocen, Espejo, José Luis, Malva y el maestro Alejandro con su clase de historia del Arte, que hacía que no refunfuñara por salir a las tres -sabía que llegaría a mi casa una hora después- . Para mal, al misógino del maestro de Literatura y Psicoanálisis; del máster, recordaré a casi todas mis maestras por puñeteras racistas, y a quien siempre adoraré será a Miguel Ángel Vega -oh, está entre mis top 3- que indirectamente me motivó a reflexionar más sobre la traducción y a defender mi español y a quien profesé un amor profundamente platónico, a Juan Manuel que me divertía a pesar de su preferencia por las francófonas -eso sí, me regaló un lindo libro- , a Rosario por demostrar que para traducir textos literarios no es suficiente ser perfectamente bilingüe.
Como profesora : nunca olvidaré a Nicole, que a sus 17 años despliega una lucidez intelectual que muchos universitarios desearían tener, a Monqui cuyos deseos por leer y vivir espero continúen a pesar de los riesgos de la adolescencia, a Mariano con su mirada de cordero a pesar de lo que pueda ser o puedan decir de él, de los cuentos de todos mis ex alumnos de tercer semestre y del texto poético de un chico de quinto semestre, así como las obras de teatro que todo ese grupo hizo.
Quise dejar al final a Pablo Sol, joven profesor de quien fui fan, y a pesar de su estoicismo, rigor y inaccesibilidad me hizo responsable en el cuidado de las ediciones, de la lectura y debo reconocer, me atraía. Ah, y bueno, entrados en gastos, debería mencionar a un profesor de francés, dolor de cabeza, de quien pensé haberme enamorado y con quien me enredé irresponsablente días antes de su retorno a Paris.
A mis entrañables, felicidades, y no sé, a pesar de lo raro de mi vida, debería felicitarme, un poco, sólo un poco.

sábado, 2 de mayo de 2009

Un mayo, mayo, mayo a la Bosé versión viral. Testimonio de una xalapeña durante la inercia porcina

El mes que más me gusta es mayo, por varios motivos : las suspensiones de clases, los puentes, la onda de calor, aunque insoportable, siempre abre mejor su falda durante la noche, haciendo el aire más sutil. Curiosamente durante estos años, al llegar mayo, nunca se presentó algún pasaje digno de llorar, tontamente puedo decir que espero este mes por que me hace feliz. Tal vez su viento contenga mayor número de endorfinas.
En este 2009, en este mayo ahora mexicano, lo que posiblemente tendré será: próximos pagos, descanso, y la propuesta de un viaje... bueno, ya no se hará, en vista de la alarma-pánico mundial propagada hace unos días, creciendo, multiplicando la neurosis y el rechazo hacia el extranjero -en este caso del mexicano-. Resultan inquietantes testimonios de paisanos que han sido tratados con desprecio en aeropuertos de algunos países como España, Israel, Estados Unidos -y seguramente la lista de naciones se volverá más grande- just because they are mexicans and probably they have swine flu... hace poco, mientras caminaba, recordé un estribillo de una canción de los deftones que dice this is the end, somewhere this is the end...
Nos llueve sobre mojado. Recientemente chateaba con un chico con quien anduve el año pasado, un adorable alemancito, y me contó que la prensa del Reino Unido decía que eran más de cien los muertos por influenza en México, y luego me contó de una chica que le mencionó: "de los países que he visitado mi favorito es México, pero no me gustaría vivir ahí por que hay muchos pobres"... no quiero reproducirles lo que pasó por mi cabeza en aquellos instantes. Enfermos y pobretones, lindas apreciaciones tienen de nosotros.
Por supuesto que algo pasa, y por supuesto que el H1N1 existe en México y hay que cuidarse, y en el df el número de infectados es notable por el gran número de habitantes que tiene. Dicen que todo comenzó en Perote, que no está muy lejos de Xalapa, y que murieron 60 personas. Nuestro gober no nos mencionó eso. También -vaya casualidad- esta difusión mediática del miedo ha silenciado situaciones que enferman más a México como el narco, la crisis económica, la ley que aprobó el Senado para que los policías puedan circular como civiles y también se especula de otra en la que el gobierno pueda tener acceso a nuestro registro de llamadas, ya sé, esto último está jalado de los pelos y pensarán "bájale a tu conspiración del gobierno", lo que puedo decir es que algo no anda bien, insisto, hay que cuidarse de la influenza por que hay casos, pero aquí hay marrano encerrado. Unos dicen que se trata de un chupacabrazo.
El Presidente nos ha pedido nos quedemos en nuestros hogares... bueno, en algunos hogares -incluyendo el mío- esto se ha convertido en prueba de resistencia para no terminar agarrados de las greñas. Esto es un curioso fenómeno de las relaciones interpersonales. Se nos ha pedido no tener contacto, mantenernos alejados, quedarnos en casa. Pero las madres ya no saben cómo soportar a sus hijos, y los hijos hemos perdido la forma de hablar con ellos, eso me ha ocurrido en estos días, en los que mi padre, con todo respeto, parece león enjaulado.
Y de que he tenido contacto, damas y caballeros: me he dado unos besucos, de esos grandotes y créanme, ninguno de los dos estamos infectados :p.
He salido casi toda la semana por la noche, a beber chelas, a jugar cartas, a convivir con la banda. Salgo a la calle y de diez personas únicamente dos usan cubrebocas. Las madres llevan a sus niños al parque a jugar pelota, se llenan los centros comerciales, el bar al que fui dos veces esta semana estaba lleno, los chicos buscan retornos donde poner música electrónica a todo volumen -los antros están cerrados- y beber cerveza, y el lunes pasado me dijo un amigo que hubo una fiesta, con mucha gente, y el ambiente, según él, fue especial "porque todos estaban bien pedos", me dijo: "fue una fiesta contra la influenza, y ganamos".
Mi madre y mi padre estaban consternados cada vez que les decía "salgo un rato". Una noche me dijo mi padre "estas no son vacaciones", evidentemente no dije nada, le mandé un beso y me fui. Conforme pasan los días las cifras van cambiando, prodigy y yahoo muestran notas alarmistas, igual en los noticieros. No hay registro de la cantidad exacta de muertos, no sabemos quiénes han sido los más afectados, si hombres, mujeres, ancianos, niños, tampoco sabemos el nivel socioeconómico de los infectados, estamos rodeados de cifras "fantasma", sólo tenemos el bombardeo mediático de "alarma por influenza". Tampoco entiendo por qué se agotaron los tapabocas si son bien pocos quienes los usan, de verdad, creo que a veces lo cargo por presión maternal, voy a l parque a correr y somos dos o tres de veinte que lo llevan... de hecho una niña y su padre me veían como bicho raro esta mañana.
El 6 reanudan las actividades escolares. Y con ello las mías. Esta pausa, más que provocarme aislamiento y pánico, sólo me ha dado la oportunidad para descansar de mi jodido horario de trabajo y de convivir con los amigos, sobre todo aquellos que no veía. Si no tuviéramos este paro, no hubiera podido reencontrarme con dos ex compañeros de la facultad, a quienes vi, abracé, comimos cheetos, brindamos, y no pasó nada.
Ahora, por otra causa me pierdo de una fiesta, una muy buena, en la que están en frente a una fogata, con la música a todo lo que da, bebiendo hasta perder la noción de sí mismos... mi amigo me ha llamado hace un momento, sí, me hubiera gustado estar en esa fiesta...
Seguiré saliendo, cuidándome, pero sin tener miedo, no lo tengo en realidad. Y como dice mi abuela "si te toca es por que te tenía que tocar", además, como dice la canción popular:
Se va a acabar, el mundo se va a acabar si un día me has de querer, te tienes que apresurar
Ah y claro, pensando en la canción de Miguel Bosé, por que este mes me da nostalgia de amar y alegría de vivir
Mayo, mayo,mayo
porque mis suspiros no enferman a los demás.

miércoles, 29 de abril de 2009

Notita sin influenza, previa a un post largo

Un amigo acaba de regalarme un libro que, lo cito textual, "te vas a cagar parada". Este acontecimiento, desprendido de una natural necesidad fisiológica, no ha ocurrido y no creo que ocurra, y no me encuentro en una etapa para experimentar cómo sería. Sin embargo, llevo la lectura poco a poco y me está gustando mucho. Agradezco a este muchacho este "regalo esplendoroso", por que de verdad para mí lo ha sido.

El agua en su silencio de raíz
en su oscura lentitud de raíz
se abre temblando

El día se bifurca
los árboles se llenan de aire y de ruido
el cielo se hunde en la luz

Quedan las palabras


Gloria Gervitz


Ahora, comparto lo siguiente. Revisando la bandeja de entrada de mi correo, encontré que el destinatario se hace llamar yo xalapeño y el tema era ¡hola maestra! abro el correo y encuentro el siguiente mensaje:

Hola maestra, solo quería decirte que estas guapísima y me encantas, tienes la sonrisa mas encantadora y sexy que alguna vez he visto! Tu admirador

¡Nooo! ¡ahora piensan fastidiarme así! ¡no lo lograrán!
Bueno, me dio mucha risa.


Canción para disfrutar esta tarde : Le petit train de Raphael

Me voy, que el Manchester le gana al Arsenal, y, según mi padre "que disque él los entrena" :p

lunes, 27 de abril de 2009

Influenza porcina. Algunas medidas preventivas

Debido a la extensión de la epidemia y con la finalidad de hacer todo lo posible para cuidarnos, menciono algunas medidas preventivas para prevenir posible contagio:

- Mantenerse alejados de las personas que tengan infección respiratoria.
- Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón.
- No saludar de beso ni de mano. (Novios o amigovios por favor tomar estas medias también, NADA, NADA de contacto, nos pese o no... en fin, nunca está de más los periodos de celibato)
- No compartir alimentos, vasos o cubiertos.
- Ventilar y permitir la entrada de sol en la casa, las oficinas y en todos los lugares cerrados.
- Mantener limpias las cubiertas de cocina y baño, manijas y barandales, así como juguetes, teléfonos u objetos de uso común.
- Cubrirse nariz y boca al toser o estornudar.
- Utilizar cubrebocas, tirar el pañuelo desechable en una bolsa de plástico y estornudar sobre el ángulo interno del codo, entre otras.

Con ello no quiero promover la neurosis colectiva, que me molesta tanto, sin embargo resulta conveniente anticiparse a las eventualidades, y como diría cheli, mi compañera de trabajo: que dios nos agarre confesados

¡A cuidarse y que podamos vernos pronto!

Tengo una pregunta para ustedes... ¿tienen miedo?

martes, 21 de abril de 2009

Cuando el otro se anula a quemarropa

Hace dos días, un acontecimiento paró en seco la perspectiva de mi fin de semana. Por un amigo me enteré que cerca de un antro -pésimo por cierto - asesinaron a un chico a sangre fría. Diez, doce, de ocho a diez, es el cálculo de los tiros que diversas fuentes dicen le proporcionaron. El motivo: la prensa dice que el origen fue afuera del lugar, otros, que ya había comenzado en el interior, una riña de un novio que lo único que hacía era defender a su chica de un -eso dicen- ex novio que la molestaba. Las cosas ya no se resuelven a golpes o en un duelo, sino a quemarropa.

Curiosamente había leído, horas antes de enterarme, una anotación que hice hace unos años cuando leí la huella del otro de Lévinas y la asocié inmediatamente: lo que caracteriza a la acción violenta es el hecho de no mirar de frente aquello a lo que se aplica la acción : el hecho de no encontrarlo de cara, de ver a la otra libertad como fuerza, como salvaje, de identificar el absoluto del otro con su fuerza.

¿Por qué coartar la libertad, la vida del otro? ¿acaso ahora el hombre intenta definirse a sí mismo violentando -más oculto de sí mismo, al fin y al cabo el alma es follaje interminable, humo que el fuego no provoca, sino el aliento de una voz que por temor a todo va muriendo - ?

Tal parece que la vela que iza nuestro siglo se mueve mediante la supresión de los demás para alcanzarse -alcance falaz e inútil por que, al fin y al cabo, no seremos mejores si agredimos a la gente, ya sea para obtener un mejor puesto, o una pareja, o más dinero, o más posesiones materiales-. Poco a poco la gente ha ido anulando eso que llaman la completud, obtenida por una búsqueda basada en un verdadero enfrentamiento con uno mismo, por que somos ciénaga y borrasca, páramo y selva, las definiciones de ese uno que debemos saludar en el espejo todos los días nos estorba ¿por qué necesita el común violentar al otro, si nunca ha sido enemigo, ya que es errante y doloso como todos?


No aspiramos nada puro, escribió Montaigne. Pero al escribirlo él no contaba ni con asesinatos, ni los secuestros, ni las ejecuciones, ni las violaciones. Lo confieso, a veces me da asco lo que vivimos, la despersonalización, la indiferencia, la apatía, la falta de interés por el mundo y la naturaleza de las cosas. Todo es inmediatez, mediana,superflua, todo se arregla a golpes, tiros, humillaciones. Experimentamos no sólo la gran crisis económica, sino la espiritual -y pido una disculpa si este adjetivo les parece tonto - .

¿Qué ganaba aquél con tirar tantos balazos, con dejar en el suelo a un chico que sólo quería defender a su novia? ¿ahora se sentirá mejor, "honrado" - cada vez siento mayor aversión por conceptos tan socialmente ridículos como honor, reputación, venganza, poder-, respirará más hondo? Ni las drogas ni el alcohol justifican cualquier acto de violencia - estas sustancias también nos suprimen, pero no pienso ahondar en ello ni este día ni ningún otro por venir-.

No quiero ponerme moralina, seguro alguno de ustedes pensará ¿y esto a mí qué carajos me importa?

Nada más puedo decirles con un tono desencantado y triste: yo sólo sé que el otro ya no existe.

sábado, 18 de abril de 2009

Anotaciones de agenda. Concluyamos de la mejor manera este fin de semana

(Este post es para Michelino, por que sé que cuando puedes me lees. Todo mi afecto)

Canciones para golpear la ola de calor

Helter skelter - the beatles
Wild thing - the troggs


Palabras del sábado sombra, una semana luego del sábado de gloria

Mi dolor no termina: cuando abandona la frente vuelve para abandonar el corazón

Li Quingzao

Más palabras para domeñar al ventilador antes de las cinco de la tarde:

el silencio tiene boca de fuego
allí
se abrasan las palabras

Francisco Romano Pérez

Canción para agitarte, por que voy a verte, por que voy a tu encuentro y sé que voy arruinarme en olas:

Sex on fire - Kings of Leon

Canción para protegerse del desastre anterior

Given to fly - Pearl Jam

Concluyamos, de la mejor manera posible, este fin de semana

miércoles, 8 de abril de 2009

Lo que la abuela cuenta. Feliz cumpleaños

Hoy cumplió años doña Li. Es su primer año sin don Fer, a quien dice no echar mucho de menos, a quien menciona de manera impersonal. No la juzguen. Li es así, desde niña siempre se hizo su santa voluntad, le daba órdenes a los trabajadores, trepaba a los árboles, jalaba de las trenzas a quien le molestara y nunca le rompieron el corazón. Cuenta que antes de conocer a don F. le gustaba un general, pero éste la engañó con otra chica, ella los descubrió en un baile. En fin, a otra cosa, pensó. Es lo único que no tengo de ella, ese gran temple-soberbia-fortaleza.
Ahora la hacienda donde vivió es un terreno triste y mal repartido. La herencia muestra siempre la rapacidad que llevamos dentro. Y uno de los hermanos las dejó sin nada, sin el recuerdo de los pasillos donde mamá Moncha y mamá Lasa, sus tías, solían, ya muertas, arrojar piedritas por la noche a los nietos cuando tenían que cruzar el corredor para ir al baño. Tampoco existe el lugar donde hacían las paletas heladas. Una parte de ese lugar lleno de recuerdos es ahora imprenta del esposo de la tía Conchita. Lo demás, propiedad del hermano que se llevó todo, doctor, dicen.
Le gusta escuchar a Juan Gabriel, espera ir al concierto al que según esta tamarinda le acompañará, nunca deja de moverse, va de un lado para otro, y cada vez que me jorobo me pellizca la espalda y me dice que debo ponerme más rímel en las pestañas "por que no me veo arreglada". Le gusta el tequila, pero ayer por la noche, como pre-festejo, me dijo que bebiéramos juntas una botella de vino tinto que tenía por ahí, y, como consigna, "teníamos que terminarla esa misma noche". Ahora pone un cd que le regaló su sobrina, uno de Jaime Sabines en Bellas Artes. A mi abuela le parecía un hombre guapísimo, al que según le llamaban el Santo, y todas las chicas volteaban a verlo. Doña Li comenta que es una lástima que ya esté muerto, porque aún viejo, "cómo le gustaba". Li mostró preferencia por hombres de ojos claros (aunque al final se casó con uno de ojos café), gusto, que si puede transferirse en los genes, se lo pasó a su hija, casada con un hombre de ojos color verde, a la nieta mayor cuyo esposo tiene los ojos azules, y a la nieta menor, que a pesar de tener "gustos surtiditos", siempre suspira por celestes ojos laguna (no comprendo por qué los vikingos, un par de germanos y un holandés ahora están tan lejos).
Nos pide que escuchemos esos poemas de Sabines, que además de apuesto fue un gran poeta, y muestra un aire triunfal porque era chiapaneco como ella y por que llegó a verlo cuando era adolescente.
Ahora está recostada en el sillón, compréndanla, está cansada. Duda del futuro de nuestra selección mexicana y obviamente su equipo es jaguares. Quizá en unos minutos, cuando se recupere, jugaremos cartas, por que ella ha sido mi escuela, así como don Fer fue el dominó. Este día le ha prestado a su nieta la menor uno de sus collares de perlas, ah y un par de aretes porque dice que no puedo andar como los hombres, con las orejas pelonas.

viernes, 3 de abril de 2009

Viernes. Caluroso viernes, inútil viernes. El ocio suele ser un gran derrochador

La selección mexicana de fútbol no tiene remedio, pongan al técnico que pongan.

El día de hoy no hay actividades en la biblio, así me lo notificaron, sólo que tengo que estar aquí, hacer acto de presencia, faltando cuatro horas para irme a casa. Debería pedir permiso e ir a comprar un helado. No quiero interpretar la suerte, de hecho no sé si existe. Mi ipod, hace dos horas, dejó de funcionar. Comprenderán que en este contexto laboral, en donde sólo prenden la radio y escuchan los cuarenta principales, si no tengo este gran amigo musical, terminaré como leoncito en una jaula reducida, sin agua y sin comida. Ya comienzo a sentirme así.

(Yo también tengo "una vida")

sábado, 28 de marzo de 2009

The endless backyard, prolongado recreo. Paro laboral

Debido a inconsistencias en la dirección de Escuelas normales, que han perjudicado incluso a esta muy humilde cabaretera, el pasado miércoles fue anunciado un paro de labores en mi lugar de trabajo y en la Escuela Normal. Mi sindicato me dijo "preséntate a la hora que entras a trabajar y vete a la hora en que termine tu jornada laboral, sólo que cuando llegues te vas con nosotros y firmas tu asistencia". Pude haber firmado a las siete de la mañana y con la misma largarme a mi casa a dormir, a leer, a dormir, o a buscar a alguna alma de la caridad para beber alguna chela después de las doce, ya saben, antes es alcoholismo y debo guardar las apariencias.
Soy indiferente a las protestas sociales, y mucho más sindicales. Recuerdo cuando me tocaba el paro cuando estaba en la facultad, que ni la USBI abrían (pasa lo mismo ahorita, creo) y teníamos otros días para cambio de semestre, oh, eso para mí era un gran alivio, tenía más día para levantarme tarde y no verle la cara a personas indeseables. Es sólo que letras puede ser un pasillo deprimente... Sin embargo en ésta me encontraba obligada a asistir. Como he mencionado líneas arriba, la decisión del Director de escuelas normales de detener movimientos (pagos) para los que hacen interinato fue un golpe bajo para mí, ya no tengo liquidez, así que falta de dinero = suspensión indefinida de actividades tamarinderas, nada de alcohol, nada de cine, nada de viajes, nada de pelis pirata, nada de libros, perfumes, mokas fríos y otras bebidas sanas y refrescantes.
¿Por qué esta persona dijo: a detener pagos? De repente, se le ocurrió lo siguiente "quiero ser improcedente, revisar perfil por perfil, que son muchísimos, y determinar si las personas que hacen interinato están capacitadas para realizarlo, es decir, quiero que todas éstas cuenten con maestría, doctorado, vale sombrilla si la Escuela Normal no tiene una más amplia oferta académica, no, eso no me importa, lo que cuenta es dejar estas personas que se alimenten de aire y no sé, igual y a la mera hora les dijo, pues resulta que ya no quiero que trabajes aquí..."
Hablando un poco más en serio, lo que el director de escuelas normales quiere realizar, debe hacerse en tiempo y forma, y no de la noche a la mañana y mucho menos debe hacerlo de esta forma tan arbitraria e irresponsable. Sin embargo, recuerdo estas palabras Bienvenue! Tu est au Mexique!!!! tierra del lastre burocrático y desmedida corrupción.
No sé hasta cuándo me pagarán. Mi esperanza, mayo. Pero esto, como dicen por ahí, no tiene para cuándo... lejos de mis comentarios pequeño burgueses y mi condición peque bu, como diría un amigo, hay otros que sí tienen familias que sostener, un departamento cuyo alquiler hay que pagar, así como varios gastos que tienen que cubrir y que seguro, por esta locura, deben estar tronándose los dedos. Al final los funcionarios sólo funcionan con base en sus intereses.
Regreso a mi aventura de paro.
Estuve un rato en la Escuela Normal, sentada en una escalera. A otros profesores pertenecientes a un sindicato distinto al mío los convocaron a las seis de la mañana, así que ya había varias maestras sentadas cómodamente en las sillas tejiendo y haciendo lo que mejor saben hacer, intercambiar impresiones sobre otras profesoras, sobre los hijos, las plazas, los hijos, hablar de política y alumnos es aburrido. Llevé un libro y mi ipod inseparable, hasta que llegó la maestra Marina, mi colega en el departamento de procesos técnicos y nos dirigimos a la Biblioteca, en donde debíamos estar.
Sólo había dos mesas, claro, con sombrillas para el calor que llegaría más tarde con fuerza. En la mesa había bolillos, cajeta y jamón, y aunque algunos ya hubieran desayunado, vamos, nunca nadie dice no a la comida y bebida. Sólo su servidora, je. Había pocas sillas, y decidí encontrar una cómoda esquina para sentarme. Juan Carlos, el de las fotocopias, me cedió su lugar, me dio verguenza pero accedí de buena gana. Y así estuve leyendo, llegaron otro par de maestras. Francamente no tengo mucho que compartir con ellas. No tengo prejuicio con la edad, pero yo no tengo hijos, ni familia, ni marido bueno y conflictivo y no me encuentro interesada en absoluto en mirar la paja en el ojo ajeno, dicho de otra forma, no gusto criticar al personal de mi lugar de trabajo, sienta simpatía o no por ellos.
Al tomar las instalaciones, sólo teníamos un baño abierto y ése era el que estaba en la Normal, planta baja, cerca de recursos in humanos. Como la biblioteca estaba tomada, incluso por nosotros, no teníamos acceso. Al volver, cuál sería mi sorpresa al encontrar que el sol punzaba más y que ya habían cambiado de lugar las mesas. El maestro L. decidió quitarle la sombrilla a los maestros invidentes argumentando que la luz no los lastimaba, bueno, movió su mesa y sus sills porque estaban mucho más a la sombra. Además durante mi ausencia, algunos habían comprado una lotería para jugar y me invitaron. En fin, por qué no, sólo jugaré un par de veces y ya está, por que decidieron jugar de a cincuenta centavos, y vamos, cincuenta centavos son cincuenta centavos para mi camión.
Sólo gané una vez, 2.50, y luego decidí ser la caponera. Curiosamente el maestro L. ganó diez veces y todos comenzaron a bromearme que le estaba ayudando, les juro que no, pero todo fue broma, nada más nos faltaba la chela y de perdis música tropical. El sol estaba en su apogeo, miré el reloj, aún me quedaban dos horas. Llegaron los del sindicato a regalarnos tortas y refresco, algo que me causó risa, pero dejé de cuestionar mi situación en ese momento, me detuve mejor a observar la dinámica que estaba llevando con los maestros con quienes jugaba. Yo era la más joven, soy de las nuevas ahí, y en verdad olvidé las grillas que hay afuera, incluso en el interior de la biblioteca con los profes que no se soportan, unos habían comprado una TV Novelas y el maestro L. comenzó a preguntarse si la chica en la portada de verdad existía, si era un invento de photoshop, porque, según afirmó, le encantan las mujeres.
La última hora la pasé tirada en la hierba, donde daba la sombra, leyendo un poco y otro tanto parando oreja, llega un punto que los chismes pueden ser amortiguadores del tiempo y las circunstancias. Me despedí, atravesé la biblio, me puse mis lentes del sol y me fui a casa. Llegué a mi casa con una sensación ajena a todos estos días de cansancio, me resultaba divertido ese día, a pesar de todo, pero me sentía rara por no haber trabajado nada. Pero el día después fue retomada la cotidianidad, las mismas horas de clasificiación, ya no había ni lotería ni refresco, ya no era necesario una sombrilla, mucho menos una caponera.
Al final esta anti aventura tuvo el mismo efecto que escuchar, en un día de verano, con las ventanas abiertas y el ventilador a un lado, un disco de Belle & Sebastian, interrumpido e interferido por el grito prolongado de las madres que te dicen "ya ven a comer".
for the price of a cup of tea...

sábado, 21 de marzo de 2009

Dumb animals. Atascos xalapeños

Esta mañana mi madre decidió ir por mí al lugar donde doy clases, y nos dirigíamos hacia veinte de noviembre cuando, a unos cuantos metros, pudimos ver que se congregaba gente de amarillo y negro, perredistas pensé, y en efecto, llevaban banderillas correspondientes a ese partido. Como pueden imaginar, la concentración de automóviles fue tal que mi madre decidió dar una indebida vuelta en U por CAXA, y volvimos a casa, un poco cansadas, fastidiadas por que tal parece que hay que salir por la noche en esta ciudad para encontrar mayor sosiego vial.
Este es uno de tantos inconvenientes que arrastra Xalapa. El día de ayer anunciaron en un periódico, el cierre de las calles Murillo Vidal, Circuito Presidentes, Zamora y no recuerdo cuál otra, debido al desfile que ofrecería el equipo local de basquetbol por haber ganado el campeonato, y la semana pasada también fueron cerradas calles por el carnaval.
Yo lo llamo irresponsabilidad, y de proporción infame. Lázaro Cárdenas está en reparación, también cerraron Rébsamen hace poco. Resulta agobiante estar en un camión en Américas después de las dos de la tarde y esperar media hora para salir a Circunvalación, y llegar a mi casa una hora después. El incremento de automóviles es notable cada año, y con estos "arreglos" para facilitar el tráfico lo único que ocasionan es mayor caos. Platicando con taxistas, confiesan que muchas veces no suben a personas que van a Jardines de Xalapa o cualquier zona aledaña, debido a que pierden mucho tiempo con sólo un pasaje. Por otra parte, hace tres semanas, esperaba un camión atrás del Parque Juárez, y lo mismo, tardó más de media hora en pasar. Es uno de esos momentos en los que me gustaría llegar a casa y sentarme a ver televisión para olvidar los atascos de una ciudad que parece un pequeño Distrito Federal (además, también suspiro el Metro de Madrid, si tuviéramos uno, je).
No comprendo. Hace diez años las horas punta eran las ocho de la mañana, entre doce y dos de la tarde y las seis. Ahora es ... todo el tiempo, y los automovilistas buscan desesperados vías alternas, atajos, vueltas que permitan no sólo llegar a tiempo al trabajo, sino llevar a tiempo a los hijos a la escuela, llegar por ellos, y volver al sofá querido, para despojarse de la mala leche de estar más de una hora entre semáforos y personas tan desperadas como tú y como yo por salir de ahí.
Xalapa ya no es lo que solía ser.

lunes, 16 de marzo de 2009

error de edición

Es Thom, no Tom, y esto no me permite corregir.

Disculpas a los lectores, ahora sí, lean mi blog :D

Everything in its right place. La tamarinda en el concierto de Radiohead

1.1 Breve historia de por qué soy fan. He pensado siempre que todo motivo musical justifica los medios
En mi casa nunca se hablaba de bandas de rock, y mi hermana mayor nunca fue una persona interesada en la música. Lo que escuchaba era lo que pasaba en la radio, en MTV cuando por fin mi padre contrató el cable y luego por algunos amigos. Sin embargo el primer cd que compré sin ninguna orientación fue the bends. Recuerdo haber entrado a una tienda de discos, tenía 14 años. Acababa de pasar por una profunda depresión de repercusiones significativas, por lo que cuando llegué a casa y comencé a escucharlo comenzó a consolarme de aquel momento en que consideraba mi puberta existencia miserable . Mi canción favorita era high & dry, aunque street spirit and black star me hacían pensar que no era tan grave que mis mejores amigos fuesen tres chicos, porque, quienes fueron mis compañeras en la secundaria, oían otras cosas, y me consideraban rara.
Siguió Ok computer, y debo reconocer es de mis discos favoritos. Suspiraba con let down y me ponía a bailar con electioneering. Pero Kid A aún deja algo de nostálgico en mi vida. El motivo: me di un año para entrar a la universidad, no veía a nadie, y comenzaba a enamorarme de mi profesor de francés. Cuando lo escucho, me recuerdo siempre en uno de los sillones de la sala de mi casa, cuando leía El tambor de hojalata y tenía a un lado a shuan, una gatita que me obsequiaron y que tuve buscarle otro lugar porque en mi casa siempre han preferido los perros. Se colocaba en el brazo del sillón, y de vez en cuando la acariciaba para que no se molestara conmigo. Tenía los ojos verdes y era blanca con café y manchas un poco más oscuras. Debo añadir que era toda una dama.
El siguiente disco, Amnesiac, lo compré en la FNAC en Montpellier, durante mi pequeño viaje. Me di el lujo de elegir la edición especial que contenía el libro rojo ¿lo recuerdan? like spinning plates es de mis preferidas.
En la universidad uno de mis mejores amigos, quien es fan y en este momento debe sentir un fuerte dolor de estómago por no encontrarse en el país, me my iron lung, uno de lados b y otro gran amigo me obsequió uno en concierto en Amsterdam. Hail to the thief, no recuerdo por qué no lo compré nunca, quizá por estupidez, y el último lo conseguí cuando estaba en Madrid.
Cuando me enteré que este año tocarían en México, supe que no podía dejarlo pasar. La primera vez no encontré entradas, pero gracias a un amiga me enteré que había una, no muy barata, pero estaba dispuesta a invertir por una banda que me ha acompañado en mis momentos más cabaretontos. ¿Por qué no? No me importa el grado de cursilería-estupidez con el que puedan valorarme.
1.2 Good evening concert bell
Llegamos al foro sol y mis compañeros y yo decidimos echar un vistazo a los numerosos puestos donde vendían playeras, sudaderas, pulseras, tazas, llaveros, posters, fotos... Sí, sí me compré una playera :D.
Una vez que entramos al foro Sol decidí no contar el tiempo. Buscamos lugar puesto que ya muchos se habían sentado para "apartar buen sitio" ya que estuve en zona Gral A, ahí, en pleno escenario. El precio de la cerveza y otros alimentos apto para chicos Polanco, a 70 pesos un vaso como de coca-cola grande que venden en Burger o en Mcdo' y la caguama a 90. Imposible agarrar el pedo, la verdad. Incluso el agua embotellada, una pequeña, salía en casi 50 pesos, vamos, todo un negocio. Los hermanos Sua, dos chicos adorables con quienes fui, comenzamos a hablar, pero tenía otra distracción, y por favor lectores masculinos no se sientan ofendidos: bizcochitos por aquí y por allá, de repente me sentí en el paraíso, yo sólo fui a escuchar a Radiohead, pero aún no eran las ocho de la noche y algo tenía que ver ¿cierto?
De repente todos empezaron a levantarse, y me di cuenta que tendría que usar el ingenio para llegar a ver a mi banda desde la distancia en la que estaba. Damas y caballeros no soy alta, y en aquel momento realmente quise medir mínimo 1.75. Como buenos mexicanos-incivilizados que somos, hubo empujones porque los que habían llegado tarde querían estar lo más cerca posible del escenario, comenzaba la concentración, no había espacio entre una persona y otra. De repente un chico muy alto se colocó enfrente de mí, y otro listillo comenzó a empujarme para tener mejor posición. Imaginé pasajes violentos, en los que me veía dando codazos y diciéndole al alto de adelante que no mame, que se moviera un poco. Todo pensado. Aplausos. Aparecieron tres tipos cuyo nombre la verdad no supe y ni investigué. No quiero hablar mucho sobre los teloneros, para mí fueron un coñazo, una mierda. Pude haberme iniciado, gracias a esa música electrónica, a las drogas artificiales, porque no imagino otra forma para soportar los casi 60 minutos que estuvieron en el escenario. Lo único divertido fue cuando se fueron y colocaron tres robots, y comenzaban a moverse mientras la letra era "we are robots, we are robots". La banda no se prendió, créanme. Todos queríamos que dejaran de tocar. Y cuando se fueron todos nos aliviamos, esperamos un poco más y de repente más empujones, más imprudentes que querían ir hacia adelante. Ya no se podía, éramos muchísimos. Llegó un momento que pensé "esto ya valió madres". Cuando apareció Thom Yorke todo se detuvo, y mi mal genio-preocupación se fue al carajo. Nunca lo vi tan encantador como ayer por la noche, con su cabello no tan corto y su camisa azul. Todos gritamos como locos, y ahí empezó.
Quienes hayan pensado que todo era in rainbows, se equivocan. Tocaron también lucky, there there, the national anthem, optimistic (oh, cómo disfruté esa rola), idioteque, airbag, paranoid android, no surprises, fake plastic trees, pyramidal song, my iron lung, street spirit, the national anthem y cerraron con everything in its right place.
Perdí la cuenta de las veces que Yorke cambió de guitarras, tocó el piano también. Bailó, transmitió todas las canciones, y todos estábamos llenos de euforia, saltando, moviendo la cabeza, gritando. Bailé tanto que hoy por al medio día no podía moverme. Dicen que algunas chicas se desmayaron por la falta de espacio y de oxígeno (porque eso sí, la presencia del olor a humanidad y a porro era protagónica).
Qué más puedo decirles. No soy experta en música pero en mi humilde opinión la banda tocó con sublime arrebato, la voz de Yorke era aguda, poderosa, como un alfiler que despuntaba con violencia y dulzura nuestros gritos. Pude verlo, el alto se había movido, disfruté mucho de la música, se cumplieron mis ganas de ver a mi banda favorita.
Confieso que el día que compré in rainbows y llegué a mi pisito de Madrid a escucharlo no me fascinó. Pero gente cabarenauta, en vivo es otra cosa, créanme. Si me faltó enunciar alguna otra canción tocada ese día o momento Yorke, una disculpa. Aún tengo la conmoción musical, y saben que al ocurrir eso dejamos de lado muchos detalles, a pesar de nuestra intención de retenerlo todo.
Espero en breve, y si el hermanito Sua me envía en tiempo y forma alguna foto que tomó o video, espero poder subirlo por aquí, ya saben que soy un poco inútil con esto.
Puedo terminar diciendo que la tensión previa al concierto y otros sucesos acaecidos se fueron, se fueron.
I feel Optimistic

jueves, 5 de marzo de 2009

Caminando entre los enebros. La dificultad de las relaciones humanas




Primera parte

Nunca es sencillo terminar una relación, y no me refiero a un noviazgo (que tan bien lo es, y podría entrar en este mismo rubro) sino a una amistad. Mucho menos resulta fácil cuando un amigo le dice a otro que ya no desea más su compañía, su voz y sus consejos. Resulta más desconcertante cuando la ruptura, después de la tempestad de los gritos, insultos y sarcasmo, finaliza cuando uno le dice al otro con tranquilidad: “te quiero, pero voy a alejarme de ti, no tengo por qué perdonarte, no te odio”. Tampoco resulta “una falta de amor” despertar al día siguiente sin ganas de llorar o sin ganas de penar por el querido amigo o amiga con el que ya no estaremos ahora. No me gusta decir perder, no estamos aquí para perder “personas”. No son objetos, no son nuestro equipaje, no las compramos, y tampoco el cariño es una cuerda con la que estamos obligados a ahorcarnos.

No olvidaré la correspondencia de Wittgestein. Éste fue gran amigo de Bertrand Russell, y cuando el malestar cobró considerable altura, Ludwig decidió soltar el lazo afectivo, sin ningún rencor. Lamentablemente Russell no lo tomó muy bien, y nunca pudo perdonarle a otro “el abandono”.

En otro tipo de relación, la de Lutero y Erasmo de Rotterdam, que no fue precisamente de amigos, ocurrió algo curioso. El primero le escribió pidiéndole su apoyo, en aquel periodo de la Reforma, pero el otro actuó conforme a sus ideas y le dijo que no. Lutero nunca le perdonó la negativa, guardándole un profundo rencor. Erasmo no obró en función del daño potencial que pudiera hacerle al otro, sino en función de sus creencias, que no eran del todo compatibles con las de Lotharius (Lutero para los cuates). Y no estuvo “mal” que le respondiera que no “estaría de su parte”.

Si algo nos enseñan es a tomar con fuerza la mortalidad, aferrarnos a ella como un junco y que cada raíz sea una persona que queremos, que resida en la tierra y parta con nosotros. No considero que “nuestro fin en esta vida” sea la aniquilación del ser y la desmedida búsqueda de nudos que nos aten a las personas: “aférrate al otro y si no, ódiale por que te dejó”. Esto lo hacemos nosotros. Pienso que ante todo debemos buscar, solos y sin la ayuda de nadie la libertad, en donde el corazón (no me gusta usar esa palabra por ser muy cliché) se sienta en un campo abierto para sentir mejor el aire del verano y las borrascas y en donde podamos contemplar a los demás con verdadero cariño, y por qué no, también con respeto.

Recuerdo una de mis novelas favoritas, Siddartha, cuando éste decide abandonar con amor a su mejor amigo Govinda, por que era momento, no por enfado o falta de estima.

Pienso también en Unamuno y El sentimiento trágico de la vida, en la imperiosa necesidad del hombre de buscar la inmortalidad, muchas veces a través del otro. Por ello tengo la impresión que queremos “imprimirla” a través de los amigos, deseamos que nos quieran siempre, que nunca nos olviden, que los saludos queden limpios y obligados a aparecer continuamente aunque a veces no tengamos muchas ganas de hacerlos. ¿Por qué dos personas que tanto cariño decían prodigarse, un día deciden no volver a verse nunca, insultándose, jugando al odio? ¿Por qué lastima que el otro un día ya no quiera estar más con nosotros, acaso morirá un trozo de nuestra ínfima existencia por ello?

Hace dos días lo comprendí, verdaderamente me quedó claro. Seamos pámpanos o cadáveres somos y seremos los mismos, con igual rostro abrumado por los malos días, revestido con alegría por la sonrisa que uno mismo puede trazarle a cualquiera o simplemente a nadie.

Hace muchos años decidí terminar una amistad que me hacía daño. Sin ningún tipo de recelo, le dije que le deseaba lo mejor, pero que no podía continuar siendo su amiga. No lo tomó bien, y me demostró un profundo resentimiento. Ahora termino otra, y espero, de verdad espero, que no reaccione como el caso anterior, o lo que es peor, que su respuesta sea parecida a la de Russell o Lutero.

Si algo tenemos que acoger con el mayor de los afectos es la soledad y la distancia. Si no puedo obtener esa libertad, esa plenitud para ser más sincera conmigo y con el resto de la gente, no imagino otra cosa más pura a la cual aspirar.

lunes, 2 de marzo de 2009

Momentos musicales del día, para alejar a las sirenas y otros seres que fingen ser Ulises

FRAGMENTOS PARA CALLAR EL MAL OLEAJE

1.1 Fito y su sabiduría

....Y a empezar la casa por el tejado
a poder dormir cuando tú no estás a mi lado
menos mal que fui un poco granuja
todo lo que sé, me lo enseñó una bruja (¡yo!)

... Raro, no digo diferente pero raro
ya no sé si el mundo está al revés
o soy yo el que está cabeza abajo

El colegio poco me enseñó
si es por el maestro nunca aprendo
a coger el cielo con las manos
a vivir y a llorar lo que te canto
a coser mi alma rota
a perder el miedo a quedar como un idiota...

(Sí, a perderlo ¡caray!)

1.2 Otro instante Fito digno de recordar con cariño (para escuchar después de las seis de la mañana)

Se me ponen si me besas
rojitas las orejas

1.3 Para el mal sabor de boca, Fito también sabe cómo caminar por la calle con sonrisa boba

De mirarme en tantos charcos
yo no necesito espejo
sé que soy mucho más guapo
cuando no me siento feo


2. Y porque así lo he querido, Calamaro supo cómo somos las Lorenas:

Qué buena es Lorena cuando quiere
pero cuesta mucho verla sonreir
Lorena es todas o ninguna
y puede ser alguna para mí (no sé quien es ese mí, no me interesa)

Hay que ser hombre para olvidar a una mujer
si no hay otra igual
flaca no me claves tus puñales
que los males del amor me duelen más
nunca te lo dije pero quiero
arrancarte y comerte el corazón
tiene tantos pecados con razón Lorena
ganó su lugar de angustias y de alcohol (más lo segundo)

Lorena no siente pena por nadie
a Lorena nadie le debe un favor
desde a nena que a Lorena le enseñar
que en la vida nunca es nada por amor

... no dejes que tu ángel te abandone Lorena
es más fácil volar con él

3. Pero Cat Power llega y dice:

Metal heart, you are not hiding

4. Bloc Party añade

Turning a wonderful light
becoming a lie
turning into myself

5. Y Lamb suspiró

I can fly but I want his wings

6. Kings of convenience interrumpió

you shine like gold in the air of the summer

7. Radiohead, un poco harto, termina

Let down and hanging around
crushed like a bug in the ground

let down and hanging around
you know you know where you are with
you know where you are with
floor colapses floating bouncing back and one day
you know where you are with


Al final, éste es mi Peñón de Leucade, y el embate de las olas sólo dice "this is no man's land"

NO MAN'S LAND

sábado, 28 de febrero de 2009

Imagen de la semana



foto de Gertrude Fehr, Alemana

Así quiero mirar ahora al mundo, como si el guiño que hago al otro significara sólo la mitad del vaso de una fiesta que aguarda ser colmado.

lunes, 16 de febrero de 2009

Anterior apariencia de Alice Waters. ¿Casualidad en las donaciones de libros?

En este momento me encuentro revisando libros en inglés que donaron a la biblioteca. Tengo que hacer una "selección" de aquellos que pueden ser útiles para la salas de consulta. La gran mayoría son sobre estadística y... marxismo. En algún momento llegué a la conclusión que la buena voluntad de las donaciones podría ser, en realidad lanzar a otros el material que no se atreven a quemar. ¿Se habrán aburrido de Marx y del socialismo o acaso lo encuentran out, o es resignación al pensar que estas lecturas son para la juventud? Me pregunté si en mi actual contexto laboral, habrá profesores o aspirantes a normalistas que deseen leerlos, y de repente recordé a una antigua compañera de carrera que solía comprar muchos de estos libros, vestirse inicialmente como hippie y luego se transformó en una hippie-chic con senos nuevos. No pude contener la risa. Quizá el socialismo tenga vanales encantos.
Lo más gracioso fue el encuentro con un libro sobre ese tema, ya que, al final de éste, estaba la foto de los autores. Entre ellas estaba la de una chica (en aquel entonces como de treinta años, ya que este libro es de inicios de los años setenta), Alice Waters, cuyo corte de cabello lucía igual al que yo tenía hace dos años y su armazón era parecido al que usé hasta hace dos meses. En fin, partí de un texto anti burgués para atraer mi segundo superficial.
Suspiro de Arquíloco
En estas últimas semanas llegué a importantes conclusiones:
1. Ya no puedo escuchar la palabra "chido" más de tres veces en una conversación, sobre todo cuando hablan los chicos, y cuando son mayores de veinte años, me molesta.
2. Me fastidio de xalapa y el incremento de automóviles.
3. Detesto salir tarde del trabajo porque eso implica que mi tarde, inevitablemente, huirá en menos de lo que dé la vuelta.
4. De Calamaro sólo me gusta la canción Lorena, por obvias razones. No me gustan sus canciones(y no me disculpo por ello).
Sáfica exhalación
Al amor es mejor no darle la espalda. Hay que mirarlo fijamente, escuchar su lenguaje de herido mar abierto, llorar con su error que nos sacude hacia las rocas.
Al fin y al cabo el mejor sueño es el rumor del oleaje.
(Las naves siempre regresan)
Vero dirò (forse e' parrà menzogna)
ch'i' sentí' trarmi de la propria imago,
et in un cervo solitario et vago
di selva ratto mi transformo:
et anchor de' miei can' fuggo lo stormo
(Petrarca, contigo quiero terminar heroicamente el post de este día)

lunes, 2 de febrero de 2009

Carta abierta a un ex manco. The come and visit me post

Desde mi regreso hay algo que me ha hecho sentir incómoda, ridícula. Ningún chico comprende la importancia de responder una llamada después de las cuatro de la mañana. Aucun gars comprends du tout tout ce que je veux parler!!!
¿Maniática, neurótica, obsesionada? Cabarenautas masculinos, no se sientan del todo ofendidos. Es sólo que, desde que pisé esta a-veces-puñetera-ciudad y marco un número, sobre todo perteneciente a un male contact, no recibo una respuesta. He visto, con algunos cuates, cómo miran quién les marca y dicen "mm no, no contesto" desviando inmediatamente la llamada. Entonces me imagino en esa posición, en la negativa y el desvío. Vamos, a veces es importante comunicarse, no quiero declarar mi amor (¿cuál? I just can't fall in love, je n'aime personne. My love is all mine, just mine).
Entiendo que en algún momento eso puede resultar ser una piedra en el zapato, un coñazo como dicen en España. Desconozco si esto es un problema cultural, si los chicos mexicanos piensan que si una chica les llama a esa hora es porque están enamoradas de ellos. En mi caso no resulta así. Y no excluyo llamar a mis amigas, eso sí que no, pero a veces hay algo en el matiz de la voz de los amigos que puede aliviar ciertas cosas, calmar ciertas cosas...
Sólo hubo una excepción.
Cuando llegué a Madrid los primeros meses fueron un desastre. No resulta ventajosa la aparente semejanza léxica. Cuando se acercaba la navidad conocí a un chico, muy simpático, pero no diré el nombre directamente, llamémoslo Govin, luego explicaré por qué. Fue mi primer amigo allá, me llevó al Bernabeu a ver jugar al Real Madrid (soy futbolera... y madridista además), me llamaba para saber si estaba bien y tengo que admitir que nunca había disfrutado tanto ir de chelas (cañas), y por primera vez disfruté ir de bar en bar conociendo mesas, música y cacahuates, con él bebí mi primera Guinness (caray, me encanta, la más oscura, aún suspiro cuando pienso en esa espuma que antecede al primer trago, sutilmente amargo y menos liviano que el resto de las cervezas), ah, y sin él hubiera sido un desastre conseguir un móvil (celular). También mi primera salida nocturna por Madrid fue con él. Vaya peda que me puse ¿lo recuerdas? Hice todo lo posible para que bailaras, pero sólo lo haces cuando estás borracho, al menos eso me has dicho. Llegué al piso a las ocho de la mañana.
Es curioso. Pocas veces uno logra decir con cariño "la primera vez que... " y no resulta común sentir el instante prístino donde regresa la desbandada a gritar que ha llegado más de un cambio. Creo que esta sucesión de novedades fueron necesarias para romper el saco de mis tres años anteriores de esterilidad. Govin me ayudó a romperlo. Por ello procuro no guardar mucho en los bolsillos.
La casa por el tejado, feo, son las primeras canciones que escuché de Fito, Govin tenía ese cd , sin embargo, aunque sean rolas igualmente significativas para mí (ya sabes por qué), conseguí que ampliara sus horizontes musicales, jaja, muy pronto le haré una nueva lista de sugerencias porque ya no puedo quemarle discos. No estaría de más que escuchara the Smiths... ¿no lo creen? (cambio abruptamente de tiempos verbales, creo que quiero integrarlos a todos en este post)
A veces lo echo mucho de menos, sobre todo cuando veo que después de las cuatro de la mañana nada resulta, las fiestas están por terminar y no hay otro bar a dónde ir a tomar una cerveza. No sé si era su acento que conciliaba mi aburrimiento, o sólo me daba una palmada en la espalda cuando algo no marchaba bien con mis aventurillas. Me gustaría a veces que pudiéramos llamarnos con mayor frecuencia, no tiene un ingenioso sentido del humor, sobre todo cuando hace alusión a mi país, pero a veces con su "buenas" anulaba mi berrinche y mi nostalgia.
Recuerdo con afecto mi primer cumpleaños fuera de México. No necesitaba de mucha gente por que él estaba a mi lado; de los dos lindos obsequios que me dio uno era la novela Siddartha. Empecé a leerla al día siguiente y la terminé, la llevé al metro, la leía en los andenes y en el tren. Ahí la tengo, en una de las repisas en donde separé mis libros favoritos, ése y la antología de Lorca que me regaló dos días antes de volver. ¿Recuerdas mis 25?
Estoy contenta. Ha regresado al escenario e intento imaginar cómo representará los cuentos de Chéjov. Me gustaría muchísimo sentarme en tercera fila (la primera siempre me intimida) y mirarlo actuar. El chico actor con talento en Matemáticas.
Y aunque pasen los meses, aunque tenga aventurillas y me encuentre feliz con mis amigos, lo suspiro de vez en cuando. Desde hace mucho le dije que le dedicaría un post. Y hoy que me ha llamado... mira Govin, aquí está, me gustaría mucho que vinieras, ven a visitarme, quiero que conozcas a mis amigos, te divertirás mucho en México, además todo te costará menos :p. Ven por favor, Govin, porque casi nadie entiende la importancia de atender el móvil a altas horas de la noche, no es cuestión de enamoramiento, es cuestión de solidaridad, o de escuchar tan sólo tu qué tal y reirme por los mexicanismos que no entiendes.
Ven Govin, sería estupendo.

martes, 27 de enero de 2009

viernes, 16 de enero de 2009

Les poumons

Alrededor de las ocho y media de la mañana escucho, desde mi pupitre-escritorio-oficina, el murmullo de pequeños metales que caminan. La sala Braille es la pequeña ínsula de tres naúfragos que siegan el sonido, lo llevan a su silencio para colectar figuras, aprehenderlas, y una vez escurridas en la memoria, dejan ir el osario en serpentinas.
En fin, el metal camina, pero apenas se distingue. Es el sigilo el verbum de verbo para residir en esta sala. Por lo tanto coloco el celular (no tengo reloj de pulsera), reviso la hora porque sé que a partir de las ocho y media de la mañana puede aparecer a mi lado el maestro Bernardo. Le gusta llegar de sorpresa porque sabe (se lo he contado) que escucho música o leo, y no presto atención, y, por si fuera poco, mi intento de cubículo está, afortunadamente, alejado de todo el personal de la biblioteca, es mi pegueño y victorioso instante de exilio, de extranjería. Pero como siempre estoy desviándome de mi narración. Continúo. Se coloca al lado del pupitre, digo ¡Buenos días maestro Berna! y me ofrece la mirada más limpia de miseria y mala suerte, su sonrisa. Hasta el momento hemos tenido un desacuerdo laboral, pero se resolvió rápidamente, todo con cordialidad. Oh, en este lugar me gusta la constante cordialidad.
Más tarde, sobre las nueve escucho un pequeño cascabel. Es Coal que va dirigiendo al maestro Alejandro a la sala. Algunos días, cuando más cansada me siento, tengo la impresión que Coal ya conoce a los otros dos outsiders que trabajamos en esta región sui generis; al saludarme el maestro Alejandro, el perro aprovecha ese segundo para mover la cola, mirarme alegremente y saludarme colocando su hocico en mi pierna. Es el único momento en que puedo acariciarlo un poco, porque no es correcto jugar con los perros-guía, No me toquen, estoy trabajando, es el letrero que carga en su arnés para que la gente vea y entienda, en especial los niños, que tienen que ignorarlo. Es un labrador negro, de mirada impasible, que no deja de dormir cuando el maestro imprime (la impresora braille hace un ruido peor que el de una podadora, en esos momentos no puedo grabar).
Pocas veces nos molestan. Sólo cuando hay visitas guiadas. Los estudiantes observan a los maestros como si estuvieran en un zoológico viendo por vez primera un par de tigres de bengala blancos: unos sacan el celular, toman fotos o los graban cuando los profesores dan la explicación de lo que hacen en la sala y muestran la máquina Perkins, el ábaco, la computadora con lector. La última vez un par de chicas le pidieron al maestro Berna que les escribiera su nombre en Braille... debió cobrar el profe... a mí también me corresponde estar ahí y explicar lo que hago, pero como no soy discapacitada visual, no soy de su interés, a mí me da igual, lo que me desagrada es el relampagueo de cámaras fotográficas enfocando a los maestros, la pareja de tigres blancos, dos gloriosas bestias para el acervo fotográfico de los turistas imberbes. Indigno. Por ello es la sala más fotografiada.
No somos parias y no sé hasta que punto gozamos la outsider condición que nos reúne y vuelve nuestra cotidianidad más entendible. Sin embargo este vasto páramo resulta la única extensión donde nuestro y mío resuenan, nos dejan ir sin bastón y sin otro brazo que nos guíe (yo también tengo mi ceguera, pero de ella hablaré otro día) a amplios pasillos y tranquilas esquinas que a veces llamamos triunfo o libertad.